Lo que aparentemente ya no funciona para unos, les soluciona problemas a otros.
Buen día queridos lectores, muchas gracias por dedicar unos minutos para leer la columna de café y tecnología de esta semana.
El reciclaje no solo es desarmar computadoras viejas y extraer circuitos; hay una gran oportunidad de reúso para beneficiar a los que menos tienen.
Los equipos electrónicos, tienen una vida promedio de entre 5 y 7 años, sin embargo, he sido testigo de equipos que llevan funcionando 10 años y siguen dando batalla. Probablemente no sea con la misma calidad que cuando estaba nuevo, pero por ejemplo a un salón de clases si le puede apoyar o bien, tenerlas en el comedor de una institución (ONG); un celular, también puede ser de gran apoyo para niños en condición de pobreza extrema.
Por supuesto que para que esto funcione, para el caso de celulares y tabletas, los gobiernos requieren aportar su granito de arena en conjunto con la iniciativa privada, en esta época deberíamos de tener cobertura de internet al menos en todas las ciudades y el sistema educativo apoyaría mucho dirigiendo los esfuerzos a un nuevo modelo de educación.
Platicando con mi esposa, me compartía que en una universidad en línea están inscritos cerca de 500 de diferentes países de centro y Sudamérica. Todo el contenido está bajo demanda y un día a la semana es virtual en vivo con interacción con el profesor y los alumnos.
Reutilizar la tecnología también nos permite aportar a nuestro planeta. En México y específicamente en Monterrey he visto desfilar en los últimos 10 años una gran cantidad de empresas que reciclaban electrónicos.
Una práctica que he sigo cuando vamos a un restaurante y pedimos comida de más, siempre y cuando esté completa la pieza, la pido para llevar y la entrego a las personas que están en condición de calle, estoy consciente que no resuelve el problema pero así procuro evitar el desperdicio, lo mismo con equipo que ya no vamos a utilizar en la oficina, si les quedan 3 o 4 años de vida, los ofrecemos a ONG´s para que los usen por lo menos el tiempo que les queda de vida.
Aunque la industria de tecnología de consumo, año con año incentiva la compra de más productos, por ejemplo: los televisores; les pregunto ¿quiénes de ustedes tiene más de 3 televisiones en casa?, ¿cuántos años mantienen una TV en casa antes de cambiarla?, ¿1 año, ¿2 años?, por último, la televisión que desechan, ¿la mandan a otra habitación o propiedad?
Contrario a la oferta y demanda, un reto es vivir con lo suficiente (ojo, no tiene nada que ver con la escasez), me refiero vivir bien con lo necesario, ni más, ni menos y que cuando descopemos algo, procuremos compartirlo para que se reúse.
Hoy acompañé la escritura con un café latte, andaba de antojo así que fui con mi vecino de usual y casual café por uno, elaborado con granos de la región cafetera de Veracruz, por cierto, me quedé con la curiosidad de probarlo con café de la región de Nayarit, pero lo dejaré para el siguiente espresso.
Les deseo un extraordinario fin de semana en compañía de la familia y amigos.