La Reforma al Poder Judicial se encuentra en mesas de discusión y análisis.
“Creemos que estas reformas en general afectarían negativamente el perfil institucional de México, pero es demasiado pronto para calibrar la gravedad potencial antes de su aprobación e implementación”, comentó Fitch Ratings, luego de informar la calificación soberana de México en “BBB-”.
Sobre el tema, detallaron que tiene perspectiva estable, aunque destacó que las debilidades del país se encuentran en su crecimiento de largo plazo.
En cuanto a las reformas que mencionó Fitch, hace especial referencia a la del Poder Judicial, que actualmente se encuentra en mesas de discusión, que terminarán el martes de 8 agosto en Culiacán, Sinaloa, con el tema Impartición, procuración de justicia y seguridad pública.
En febrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó un paquete de reformas y modificaciones constitucionales. Una de ellas, el Fondo de Pensiones para el Bienestar.
Otra más, es la reforma al Poder Judicial, ya que el mandatario insiste en la corrupción que hay en este sector.
López Obrador dijo que con la reforma al Poder Judicial se eliminarán “el influyentismo, nepotismo, imposiciones, corrupción”, lo que beneficiará a los empleados de esa división del poder.
Por ello se propone que se elija mediante voto popular a los ministros, jueces y magistrados. Sin embargo, parece no ser viable, ya que según estimaciones del Instituto Nacional Electoral (INE), el proceso costaría 7 mil millones de pesos.
Por ello, jueces y magistrados del Poder Judicial de la Federación (PJF) realizaron una manifestación en días pasados, donde informaron que si se aprueba la reforma al Poder Judicial, en los términos planteados por el mandatario mexicano, responderán con impugnaciones en tribunales mexicanos e internacionales.
El magistrado Mauricio Barajas Villa aseguró que, al interior del gremio, “estamos plenamente capacitados y equipados, la vía jurídica está trabajando dos líneas de defensa”, una a nivel internacional y otra a nivel país.
“Ya se está trabajando en dos líneas esenciales de defensa: la primera, acudir a los órganos internacionales de protección de derechos humanos e impugnar en su momento la hoy inminente reforma constitucional, en cuya pretensión principal se encuentra la captura, cooptación y sometimiento de un poder soberano de la unión como es el judiciario”, dijo Barajas.
También se plantea acudir ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para apelar la sobrerrepresentación de legisladores de Morena y sus aliados, los partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM) en el Congreso.
