La Real Cátedra Gaudí de la Universidad Politécnica de Cataluña presentará en el año 2026, con motivo del centenario del nacimiento de Antonio Gaudí, el informe que justifique la incorporación de cinco nuevos edificios, entre los que se encuentran el Palacio de Gaudí de Astorga y la Casa Botines de León , a la lista de inmuebles del arquitecto catalán que ya están declarados por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Patrimonio de la Humanidad. Son un total de siete los edificios ya considerados como tal y a ellos se espera poder incorporar el Palacio Episcopal de Astorga y la Casa Botines de León, además del Capricho de Comillas, el Colegio de las Teresianas de Barcelona y la Torre Bellesguard también de la ciudad condal. El director de la Real Cátedra Gaudí de la Universidad Politécnica y comisario para la celebración del centenario del arquitecto, Galdric Santana, visitó ayer la ciudad de León para exponer este proyecto que «aprovechará la tormenta perfecta que se avecina en 2026» para «hacer una ampliación de siete a doce» de los inmuebles de Gaudí considerados Patrimonio de la Humanidad. El motivo de esta extensión responde a «motivos tan sencillos» como que «ya se dispone de una documentación más profunda que la que existía el año 2002», así como que «el estado de integridad y restauración de cada edificio también está en una etapa mucho más avanzada que en aquel momento». El director general de la Fundación Obra Social Castilla y León, José María Viejo, consideró que la del 2026 se trata de «una oportunidad prácticamente irrepetible para conseguir en un mismo acto dos bienes Patrimonio de la Humanidad para la para la provincia de León y para Castilla y León» y abogó por «generar un contexto de colaboración» con las administraciones que «también se pueda trasladar a la sociedad», informa Ical. En este sentido, Viejo trasladó tanto a los ayuntamientos de León y Astorga como a la Diputación leonesa y a la Junta «que promuevan mociones de apoyo» para que el proyecto de incorporar estos dos bienes «sea el resultado de la suma de voluntades, de esfuerzos y de ilusiones», ya que la declaración serviría para «dinamizar la vida cultural y turística», así como «ofrecer los máximos estándares en cuanto a conservación y preservación del patrimonio».
