Tom Aspinall afronta su siguiente pelea
con demasiadas cosas en juego. El inglés es protagonista de una
injusta y extraña situación dentro de la UFC, en la que es hoy
campeón interino de peso pesado, pero no ejercerá su derecho esencial de pelea por el oro definitivo de la división de los gigantes. Al contrario, el peleador enfrenta a
Curtis Blaydes para defender su cinta y seguir en la conversación para ser el próximo retador al título que ostenta
Jon Jones, lesionado desde hace casi un año,
que regresará de manera definitiva, según todos los reportes,
ante Stipe Miocic en noviembre de este mismo año.
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