Inglaterra y España definen este domingo, en Berlín, al nuevo campeón de la Eurocopa. A continuación, las claves tácticas que puede definir el último partido de la Euro 2024. España-Inglaterra, la pelea por la posesión La selección de De la Fuente tiene un estilo de juego definido. España arma su fútbol desde la posesión del balón. Su tridente en el medio se […]
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La selección de De la Fuente tiene un estilo de juego definido. España arma su fútbol desde la posesión del balón. Su tridente en el medio se mostró en gran nivel durante toda la Euro. Rodri, con el primer pase seguro; Fabián Ruiz, generando asociaciones en todo el campo; y Dani Olmo, con la puntada final en el área.
La habilidad de España para mover la pelota por todo el campo, con rapidez y precisión, será crucial para desarticular la presión inglesa, uno de los fuertes del equipo de Southgate.
Inglaterra es un equipo que también prefiere dominar la posesión, aunque en esta Euro no supo manejarla tan bien como los españoles. Consultado sobre si también querer tener la pelota en la final, Southgate respondió con un sincericidio: «Primero tenemos que quitársela a España».
El DT inglés sabe bien que es muy difícil sacarle la pelota a España. Y, después, tenerla durante un tiempo y dominar el juego desde la posesión es, quizás, más difícil. «Presionan muy bien, así que tendremos que ser excepcionales con el balón y tendremos que ser excepcionales sin él», agregó Southgate. España, lo mostró ante Francia, es tan bueno recuperando el balón como teniéndolo en su poder.
Los ingleses concentrar sus ilusiones en la línea media. Durante toda la Euro mostraron que, aunque impreciso, es un conjunto infatigable. El doble 5 que conforman el experimentado Declan Rice y el talentoso Mainoo garantiza buen manejo y mucho despliegue. A ellos hay que sumarle lo que aporten los laterales por las bandas, los retrocesos de Harry Kane y, en especial, la conexiones que ofrezcan Jude Bellingham y Phil Foden.
«Inglaterra tiene jugadore de calidad que pueden aparecer en cualquier momento. Vamos a jugar contra un equipo muy poderoso, con mucha experiencia, no solo a nivel selección, también sus clubes. Va a ser duro», aseguró De la Fuente, al ser consultado sobre esa batalla que se espera en la media cancha.
Si bien ambos equipos apuestan por un juego de tenencia, donde es probable que se imponga España, ambos saben correr. En esta gran final, las transiciones rápidas podrán ser decisivas. Cuando ambos rompan la presión encontrarán a sus rivales mal parados y deberán aprovechar.
España tiene a especialistas para esta tarea. Las subidas de sus laterales, Dani Carvajal y Cuccurella, la velocidad de Nico Williams y de Lamine Yamal, son ideales para aprovecha la visión de Ruiz y el desquilibro de Olmo. Así gesta España sus contrataques más profundos. Lleva 11 en esta Euro. Dependerá, también, de la eficacia de Morata para aprovecharlos.
De la Fuente confía en que sus jugadores vuelvan a mostrarse eficaces como en los partidos previos. «Antes de que empiece la Euro, Inglaterra y Francia eran los favoritos, como Alemania, por que era el local», afirmó el DT. Tras eliminar a los otros candidatos en cuartos y semis, España necesita repetir el truco una vez más este domingo.
La velocidad y precisión en las transiciones será determinante también para los ingleses. La presión alta y la recuperación rápida del balón cuando España se despliega para atacar puede se fundamental para ganar su primer título continental.
El conjunto de Southgate tendrá que aprovechar cada oportunidad de tomar a la defensa española en falsa escuadra. La dinámica de sus laterales, la rapidez de Bukayo Saka en la banda derecha y las apariciones de Bellingham o Foden en los espacios pueden definir la final en su favor. También para los ingleses, finalizar estas jugadas será crucial.
«España ha sido el mejor equipo de la Eurocopa», admitió Southgate. Y ante el mejor, lo sabe el DT de Inglaterra, la única opción es no fallar.
Pese a lo que se cree, que España solo es un equipo de tiki-taka, rondos y pases gol, La Roja de De la Fuente también sabe defenderse. Los números lo confirman: Apenas recibió 3 goles en 6 partidos y mantuvo 3 veces el arco en cero. Inglaterra, en tanto, recibió 4 goles y sólo dos veces logró que no le conviertan.
España supera a Inglaterra en casi todas las estadísticas defensivas. Tiene más entradas por partido (15.3 contra 12 de los ingleses), más despejes (19.2 contra 13), y más pelotas recuperadas (53,2 contra 44,3). Estas inexpresivas cifras confirman lo que vemos. Los dos tienen mucho la pelota, un 58% por juego, pero los españoles la usan mejor para atacar y también para defender.
Como cuando ataca, la defensa de España está sostenida por el colectivo. La zaga, ya sea Le Normand-Laporte o Nacho-Laporte, se muestra firme en la marca y bien respaldada por los laterales y por los volantes, en especial por Rodri que sabe sumarse a la última línea.
Inglaterra es más un equipo de individualidades que de conjunto. Igual que cuando ataca. El gran torneo de Marc Guéhi destaca un poco por encima del juego de John Stones, casi siempre mejor con la pelota que sin ella. Pero el secreto defensivo de este equipo inglés es la joya de su media cancha.
Rice garantiza la organización táctica del los tres leones, sobre todo en defensa. Es el hombre que asegura la disciplina para armar un bloque bajo defensivo que pueda quitarle espacios a la creatividad española hasta nuetralizarla.
La pelota parada, ya sean córners o tiros libres, suele ser la vía para definir un partido decisivo. Ambos equipos han sufrido, y también disfrutado, partidos así en sus historia. España tiene hombres altos, como Álvaro Morata, Rodri y sus centrales, que pueden darle el título de cabeza. Incluso, se puede sumar Carvajal, como hizo con Real Madrid en la Champions.
Inglaterra tiene buenos cabeceadores, de Kane a sus defensores, y excelentes pateadores, de Trippier a Alexander-Arnold. Pero lo que tiene el equipo de Southgate, sobre todo, es tradición. La pelota parada es la receta casera más usada en la historia del fútbol inglés. Los británicos suelen hacer mucho daño en estas situaciones.
Imponer condiciones será decisivo en la final. Está claro que el fútbol de España se apoya en la posesión. El final de la semi ante Francia, donde los españoles tenían el control absoluto del partido pese a ir ganando sirve de ejemplo.
La selección de De la Fuente se impone con un ritmo de juego pensado, que desgasta a su rival hasta encontrar el hueco para golpearlo. Esa circulación paciente, hasta que los espacios se manifiesten, está en el ADN de su juego. Si logro desarrollarlo el domingo será difícil que no sean campeones.
«Tal vez España haya ofrecido una mejor versión hasta ahora en la fase final que Inglaterra, pero eso no tendrá ninguna influencia en un partido único», afirmó De la Fuente. En esa singularidad radica la ilusión inglesa.
Para la final, los ingleses necesitarán hacerlo todo mejor y más rápido para aventajar a España. Deberá imprimir un ritmo más alto y dinámico, aprovechando su capacidad física y velocidad. Imponer su ritmo de juego, romper la dinámica española y atacar con verticalidad y eficacia le dará opciones de ser campeón.
Habrá que esperar hasta el domingo para ver que sucede. La única garantía es que será un partidazo. Una final de Eurocopa entre España e Inglaterra no puede ser otra cosa.
/Escrito por Mariano Mancuso para ESPN
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