Por la baja de la inflación, los aumentos de salarios ejecutivos proyectados por las empresas presentan una considerable disminución y se sitúa en 180% para todo el año, es decir una caída de 11 puntos respecto a lo previsto un mes atrás. El ritmo de actualización ya se ubica 18 puntos por encima del índice de precios.
La encuesta de Tendencias de Incrementos Salariales en Argentina (TISA) que realiza la consultora global Mercer, relevó que para las empresas argentinas las proyecciones de inflación privadas disminuyeron significativamente al 162%. Con esa perspectiva, los aumentos de salarios proyectados ya se ubican 18 puntos por sobre el índice de precios.
El panorama macroeconómico actual y el contexto de relativa incertidumbre continúan representando un reto para las organizaciones a la hora de ofrecer proyecciones para el año. Hasta mayo, los incrementos se situaban por encima de la inflación (81% vs 72%).
Las empresas con casa matriz en Argentina reaccionan de manera más ágil al contexto, garantizando para mercado general incrementos superiores a las compañías subsidiarias de multinacionales.
Ante las expectativas de baja de inflación, las matrices ajustaron los presupuestos de incrementos a la baja también a mayor velocidad: el presupuesto de las compañías nacionales se ubica un 12% por debajo de las compañías subsidiarias, cambiando la tendencia de reportes anteriores.
El informe encuentra que la dispersión de incrementos entre industrias disminuyó en comparación con la edición anterior, obteniendo una brecha entre máximos y mínimos de 38 p.p. frente a los 49 p.p. del TISA previo. La proyección de incrementos de cada uno de los trimestres de 2024 no presentó variaciones significativas respecto al relevamiento de mayo.
Dentro de los criterios para definir incrementos, un 55% se basa en una combinación de factores, mientras que el 16% se basa solo en el mercado y el 14% traslada la inflación en el 100%.
Respecto a la cantidad de ajustes previstos por las compañías, otorgar ajustes cada 2 meses sigue siendo la alternativa con mayor prevalencia.
"Las empresas están reaccionando a la desaceleración de la inflación modificando sus proyecciones de incrementos salariales anuales especialmente con impacto en el segundo semestre", explicó Mercedes Bernardi, gerente SR de Desarrollo de Nuevos Negocios en Mercer Argentina, Uruguay y Paraguay.
En tal sentido, en el relevamiento de mayo se observó que "el 65% de las empresas proyectaban 6 o más incrementos a lo largo del año mientras que en el mes de junio ese porcentaje descendió a 60%".
Existen, además, compañías que no han cerrado su presupuesto anual o que lo revisan de manera continua. En ese sentido, un 14% de las compañías no cuentan con un presupuesto anual para 2024, en tanto que no se perciben grandes diferencias entre los incrementos estimados pendientes de aprobación y los incrementos aprobados.
"El paquete de beneficios está siendo permanentemente revisado y mejorado. Esto incluye a beneficios tradicionales, los vinculados con flexibilidad, así como los relacionados con el bienestar físico, mental y financiero", finalizó Bernardi.