Un nuevo embrollo judicial envuelve al Málaga CF. Jamal Satli Iglesias , representante de Management Empresarial Málaga S.L., accionista de Nas Spain y propietaria del 96,8% del club, ha presentado una denuncia ante el Juzgado de Instrucción número 14 de Málaga contra el administrador judicial , al que acusa de «malvender» al jugador Roberto Fernández Jaén , un deportista «querido tanto por la afición como por sus compañeros» que -dice- podría haber sido una pieza clave para el equipo en esta etapa. En su denuncia, Satli Iglesias destaca las recientes declaraciones del director general del Málaga C.F., Kike Pérez , quien supuestamente admitió que la necesidad de incrementar el límite salarial fue la razón principal para la salida del delantero, a pesar de que el mercado de fichajes apenas había comenzado y ya habían llegado al club dos ofertas más de otros equipos europeos. Además, Satli Iglesias critica en un comunicado que el administrador no aceptara su propuesta de una ampliación de capital de 20 millones de euros para la primera fase de un ambicioso proyecto de renovación del club. Este proyecto, con un coste estimado entre 300 y 400 millones de euros, incluye la creación de nuevas áreas hoteleras, turísticas y comerciales, así como una residencia que complementaría una Academia/Universidad de Fútbol de referencia internacional. El propietario del 49% del Málaga CF subraya que este macroproyecto no solo generaría ingresos alternativos, sino que también incorporaría desde su origen el concepto de sostenibilidad medioambiental y económica. En este sentido, defiende el proyecto como especialmente relevante dado el reciente ascenso del club a Segunda División, lo cual representa un paso crucial hacia el objetivo de «colocar al Málaga C.F. entre los principales clubes de España y Europa a medio plazo». En el comunicado, enfatiza que esta propuesta, ya presentada anteriormente, sigue siendo una prioridad tras haber clarificado en los tribunales la propiedad de las acciones del club, que pertenecen a NAS Spain. Finalmente, espera que «esta iniciativa se materialice con el consenso de todas las partes y el apoyo de las administraciones públicas, para poder llevar a cabo este proyecto del nuevo Málaga CF con un ADN socioeconómico y deportivo, tal como ha sucedido en otras capitales españolas e internacionales, gracias a acuerdos con visión de futuro por parte de los clubes y las autoridades pertinentes». Este nuevo conflicto surge apenas meses después de que el Tribunal Supremo confirmara la sentencia que reconoció a Jamal Satli como propietario legítimo del 49% de las acciones del Málaga C.F., desestimando todos los recursos presentados por la familia del jeque Al-Thani. La sentencia, además, condenó a la familia Al-Thani al pago de las costas del procedimiento, poniendo fin a un largo y complejo proceso judicial que se ha prolongado desde 2015. El conflicto entre Al-Thani y BlueBay se remonta a la temporada del equipo en Champions League, cuando la deuda del club superó los 100 millones de euros. Al-Thani buscó el apoyo de BlueBay para salvar la economía del club, lo que llevó a la creación de NAS Spain 2000 . A pesar de que Al-Thani intentó recuperar el control del club unilateralmente, la reciente decisión del Supremo reafirmó la posición de BlueBay como un actor clave en la gestión del Málaga C.F. La figura del jeque Al-Thani ha sido controvertida desde su llegada en 2010, cuando compró el club por 36 millones de euros y prometió inversiones masivas y éxitos deportivos . Sin embargo, su gestión dejó al club con una deuda de más de 100 millones de euros y sospechas de apropiación indebida, blanqueo de capitales y administración desleal . En noviembre de 2020, la justicia ordenó el embargo de sus bienes , tras ser apartado del club y nombrarse a un administrador judicial debido a las irregularidades en su gestión y los créditos no devueltos que habrían sido utilizados para su beneficio personal y el de su familia.