El portero un colegio público de Córdoba ha sido condenado a dos años de prisión por dos delitos contra la intimidad (penados con un año de privación de libertad cada uno de ellos), con la atenuante de reparación del daño causado, por grabar con una cámara oculta a dos profesoras en diferentes baños del centro educativo y en días sucesivos mientras realizan sus necesidades fisiológicas. Además, el bedel ha sido también condenado a la inhabilitación especial del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como a abonar una multa de 12 meses a razón de 6 euros al día. También tendrá que indemnizar a las víctimas con un total de 17.560 euros . En concreto, uno de las profesoras recibirá 13.560, de los que 7.560 euros corresponde a las lesiones sufridas y otros 6.000 por el daño moral causado. Igualmente, tendrá que abonar 4.000 euros a la otra profesora por el daño moral causado. La resolución , a la que ha tenido acceso ABC, señala que el conserje condenado aceptó de conformidad el acuerdo de las partes por sus conducta delictiva. Sin embargo, el portero no tendrá que entrar, de momento, en prisión, ya que la condena ha sido suspendida, salvo que vuelve a cometer un delito en los dos próximos años o no indemnice a las víctimas por su responsabilidad civil. La sentencia señala como hechos probados que el condenado «con ánimo de vulnerar la intimidad y sin consentimiento de las perjudicadas, el día 22 de febrero de 2021 colocó en el aseo de uso exclusivo de profesoras situado en la planta baja del centro una mini cámara de vídeo grabación » con la que «grabó a una profesora (también secretaria del centro), sentada en sanitario haciendo sus necesidades fisiológicas». Además, describe que «después de realizar la anterior grabación, sobre las 13.50 horas del mismo día 22 de febrero de 2021 trasladó la cámara de grabación y la colocó en el aseo del aula de infantil , donde imparte clases otra profesora e igualmente la grabó haciendo sus necesidades fisiológicas». Posteriormente, según sigue la resolución judicial «el acusado procedió de igual modo el día 23 de febrero de 2021 , grabando en un primer momento en el aseo de uso exclusivo de profesoras situado en la planta baja del centro y después sobre las 13.50 colocó la cámara en el aseo del aula infantil donde impartía clases grabando a ambas realizando, sus necesidades». Fue en este instante, según la sentencia , cuando «esta última la que descubrió la cámara sobre las 14.00 horas del día 23 de febrero de 2021». A consecuencia de los hechos, la primera de las profesoras y secretaria del colegio «ha sufrido trastorno adaptativo con sintomatología ansiosa predominante que ha requerido para su sanidad tratamiento» durante más de 126 días, aunque sin secuelas. Por estos hechos probados y de conformidad con el acusado, el Juzgado de lo Penal número 2 de Córdoba condenó a este hombre «como autor de dos delitos contra la intimidad, concurriendo la circunstancia atenuante de reparación del daño», según establece el fallo. Además, le impone «por cada uno de ellos la pena de un año de prisión, con la accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y la pena de 12 meses de multa a razón de 6 euros diarios». Además, la parte dispositiva continúa que «en concepto de responsabilidad civil» el condenado indemnizará a la primera profesora «a la cantidad de 7.560 euros por las lesiones sufridas por esta y en la cantidad de 6.000 euros por el daño moral sufrido». Asimismo, indemnizará a la otra profesora por «la cantidad de 4.000 euros por el daño moral sufrido». Concluye el fallo del juzgado que «se concede el beneficio de la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad impuesta, condicionado a que no delinca en el plazo de dos años», así como que haga frente al pago íntegro de la responsabilidad civil, de la que ya había depositado un total de 13.560 euros.
