Las verrugas comunes son causadas por el Virus del Papiloma Humano (VPH). De incidencia bastante común, existen más de 150 tipos, pero solo algunos provocan manifestaciones.
La mayoría se contagian a través del contacto cutáneo casual o a través de objetos compartidos, como toallas o paños. Por lo general, se transmite a través de lesiones en la piel, como raspaduras.
El sistema inmunitario de cada persona responde al VPH de forma diferente. Es por esto que, no todas las personas que entran en contacto con el virus desarrollan verrugas.
Las verrugas comunes suelen ser inofensivas y, con el tiempo, desaparecen por sí solas. Sin embargo, muchas personas prefieren eliminarlas ya que pueden resultar molestas o vergonzosas.
Existen varios tipos de tratamiento para remover estos pequeños bultos, los cuales deben ser indicados por un dermatólogo de acuerdo a las características de la verruga. Sin embargo, hay algunas opciones caseras que ayudan a tratarlas de forma natural.
Este truco es muy sencillo, tan solo hay que humedecer un algodón en vinagre de manzana, aplicarlo sobre la verruga, y dejarlo actuar durante toda una noche. El producto tiene propiedades tanto antisépticas como antiinflamatorias, lo que ayudará a la recuperación del estado de la piel de forma efectiva.
El ajo es un alimento que favorece el sistema inmunitario y un antibiótico natural, por lo que también permite deshacerse de las verrugas rápidamente. La forma de utilizarlo es machacar un diente de ajo hasta conseguir una pasta consistente y aplicarla directamente sobre la verruga.
Se recomienda cubrir la zona con una venda y mantenerla durante la noche para que tenga un mayor efecto. A la mañana siguiente hay que retirar la pasta y lavar el área con abundante agua y jabón suave.
Se trata de una planta cuya savia se utiliza por sus características cicatrizantes y capacidad de regenerar tejidos dañados del organismo. Para tratar las molestas verrugas, hay que aplicar el gel que contiene dentro el vegetal y dejarlo actuar durante la noche. Luego, se deben seguir los mismos pasos que en los remedios anteriores.
Este cítrico es muy popular en remedios caseros de todo tipo, desde trucos de limpieza hasta tratamientos para distintos problemas de salud. Aplicar el jugo de limón con un algodón sobre la verruga, ayudará a que esta se seque y caiga.
Si el crecimiento de estos pequeños bultos es doloroso, cambian de aspecto, o si uno no está seguro de si son realmente verrugas, es imprescindible recurrir a un dermatólogo. Uste podrá determinar la gravedad de los síntomas y recomendar el tratamiento más adecuado para cada caso.
Hay ciertas acciones que ayudan a reducir el riesgo de tener verrugas: