Descansar bien es esencial para el funcionamiento óptimo del cuerpo y la mente, pero lo cierto es que en las noches de verano se puede volver bastante complicado. Ya no por la hora en la que nos vamos a dormir o por cuándo nos debemos despertar, sino por las altas temperaturas que duran todo el día. El ventilador o el aire acondicionado son nuestros aliados, pero su alto coste puede hacer que reduzcamos su uso. Así, existe un secreto que usan los japoneses para conseguir un descanso óptimo sin el uso de estos aparatos.
Y es que la falta de sueño puede tener efectos perjudiciales en casi todos los aspectos de la salud, mientras que un descanso adecuado puede mejorar significativamente el bienestar general. El descanso adecuado ayuda a la recuperación muscular y regenerar huesos y tejidos, así como nuestro sistema inmunológico se ve fortalecido.
Asimismo, mantiene el equilibrio hormonal, incluyendo las hormonas del estrés como el cortisol, y ayuda a regular las emociones y gestionar el estrés, además de mantener un metabolismo saludable y control del apetito.
La cantidad de horas necesaria para dormir varía según la persona. Los adultos necesitan entre siete y nueve horas de sueño por día, mientras los mayores se reduce a entre siete y ocho. Por su parte, los niños necesitan entre ocho y horas de descanso óptimo todos los días.
El calor del verano puede hacer que nos resulte muy complicado dormir por las noches. En esta época, algunos puntos de España ya han alcanzado o superado los cuarenta grados, algo que ya supone un calor excesivo para cualquier persona. Y las recomendaciones para prevenir problemas de salud no solo pasan para evitar salir a la calle en las horas centrales del día, sino también para poder dormir.
Algunas de las señales que sugieren que no estamos durmiendo los suficientes van desde la fatiga diurna y la dificultad para concentrarse hasta cambios de humor, rendimiento reducido y problemas de salud.
Por otro lado, algunos consejos para mantener una rutina de sueño regular son: crear un ambiente propio para el sueño, mantener una rutina de sueño regular, limitar la exposición a pantallas antes de dormir, evitar la cafeína y el alcohol y practicar hábitos de relajación.
Lejos de recomendar una técnica complicada, los japoneses tienen su método, el cual aseguran que dormir lo más cerca del suelo posible puede ayudarnos a dormir más frescos. Esto sucede porque, según la física, cuanto más abajo duermes menos calor tienes. Asimismo, este truco se puede complementar con otro como utilizar sábanas mojadas o rociadas con agua fresca con las que nos podemos tapar, las cuales ayudar a bajar nuestra temperatura corporal.