Un mototaxista fue asesinado de nueve disparos en un brutal ataque ocurrido la noche del pasado martes en el paradero 7 de Canto Grande, en San Juan de Lurigancho. La víctima, identificada como Juan Carlos Pérez López, se encontraba esperando pasajeros cuando fue interceptado por dos sujetos armados a bordo de una motocicleta.
Según los reportes policiales, el ataque ocurrió aproximadamente a las 9:00 p. m., cuando Pérez López estaba estacionado en su habitual punto de espera. Los agresores lo interceptaron y abrieron fuego contra el mototaxista, disparándole a quemarropa en múltiples ocasiones. El cuerpo de la víctima quedó tendido dentro de su vehículo, evidenciando la violencia y premeditación del asesinato.
Las autoridades llegaron al lugar de los hechos poco después, iniciando inmediatamente las labores de investigación para identificar y capturar a los responsables. Hasta el momento, los atacantes no han sido identificados, y el motivo del asesinato sigue siendo un misterio.
Residentes de la zona expresaron su preocupación y temor ante el incremento de la violencia en San Juan de Lurigancho. Según testimonios, incidentes similares han ocurrido en meses anteriores, alimentando la sensación de inseguridad entre los habitantes.
Los vecinos han solicitado a las autoridades locales y nacionales una respuesta efectiva para combatir la delincuencia y asegurar la tranquilidad en la comunidad.
Por el momento, la Policía Nacional del Perú continúa con las investigaciones, y se espera que la colaboración ciudadana pueda aportar información relevante para esclarecer este lamentable hecho.
Un caso similar se presentó el pasado mes de junio cuando un taxista, quien se encontraba degustando comida al paso con su esposa en la urbanización 10 de octubre en San Juan de Lurigancho, fue acribillado por la espalda.
La víctima intentó huir del inesperado ataque; sin embargo, tres balazos terminaron por acabar con su vida en el acto. La esposa del taxista logró esconderse del ataque y, tras la fuga del sicario, trató de auxiliar a su esposo, pero nada pudo hacer para salvar su vida.