Pole de Jorge Martín en Sachsenring. No es novedad ni sorpresa, aunque por su tiempazo (1:19.423, nuevo récord de la pista) y la forma de elevarse por encima del favoritismo de las Aprilia dan a entender que el líder también está en plena forma en este GP de Alemania. El madrileño fue el más rápido de una Q2 en la que no estuvo Marc Márquez. El catalán quedó tercero en la Q1 después de ver frustrado su intento de vuelta rápida por culpa de Stefan Bradl, que se le cruzó en el momento más inoportuno. Márquez, que había rodado lo justo en el último libre por los dolores que aún sufre de la durísima caída del viernes , se enfadó de lo lindo. «No esperaba hacer la pole, pero el ritmo ha estado muy bien. Estoy muy contento», explicaba Martín en Dazn después de lograr su cuarta pole de la temporada, decimoséptima en MotoGP. «Creo que las Ducati siguen siendo las que tienen mejor ritmo», anticipaba sobre lo que espera tanto en la carrera esprint de este sábado como en el gran premio del domingo. [Resultados del GP de Alemania de MotoGP] Con todo, no fueron las Ducati las principales rivales de Martín, sino las Aprilia, muy consistentes en este circuito. Maverick Viñales, el mejor del viernes, sufrió una dura caída en esa Q2 que le impidió pelear por la pole. El de Rosas se quedó séptimo. A cambio, a Martín le acompañarán en la primera fila las dos Aprilia del equipo satélite. Miguel Oliveira, el más rápido del último librw, fue segundo, a 48 milésimas de la pole. Raúl Fernández, líder en la Q1, fue tercero, a dos décimas, justo por delante de la primera Ducati, la de Pecco Bagnaia. Fuera de esa clasificación se quedó Márquez por su incidente con Bradl. Antes, pese a lo poco que rodó, demostró que tiene ritmo y velocidad para estar delante. Será así el resto del fin de semana si se lo permite el dolor que aún siente en el costado. El de Gresini sufre una fuerte contusión en esa zona, aparte de tener una fractura en el dedo índice de la mano izquierda. Bradl fue a disculparse con Márquez por entorpecer su intento de vuelta rápida, aunque lo hizo con el español aún caliente por lo ocurrido y no tuvo mucho éxito. El alemán fue sancionado con tres posiciones en la parrilla, sanción inocua pues ya salía desde la última plaza.
