Las operaciones de la Policía de Control de Drogas (PCD) cayeron a la mitad entre enero y mayo de este 2024, en comparación con el mismo periodo del 2023, cuando esa fuerza policial mantenía personal en fronteras, puertos y aeropuertos. Desde setiembre del año pasado, el Ministerio de Seguridad Pública decidió sacar a la PCD de puntos fronterizos, alegando que iban a enfocarse en investigaciones.
De acuerdo con estadísticas brindadas por la PCD, las operaciones (incluidas incursiones en la montaña, erradicación de plantaciones, acciones marítimas y colaboración con otros cuerpos de seguridad) se desplomaron de 214 a 98 en ese lapso, lo que representa una caída del 54%. En tanto, las detenciones también bajaron de 248 a 178, para una disminución del 28%.
Estas cifras se presentan en momentos en que Costa Rica registra también una caída en los decomisos de cocaína, los cuales bajaron en un 55% entre el 2020 y el 2023. De 47,1 toneladas de clorhidrato de cocaína incautadas en 2020, se pasó a 24,7 en el 2022 y 21,4 en el 2023. La marihuana registró valores de entre 12,5 toneladas en el primer año, 21,6 en el 2021, 25 en el 2022 y 21,7 en el 2023.
Además, las erradicaciones de marihuana pasaron de 367.000 plantas en el 2020, a 816.000 en el 2021. Luego cayeron a 642.000 en el 2022 y apenas 369.000 el año pasado, según datos del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD), que agrupa las incautaciones de la PCD, el Organismo de Investigación Judicial, Fuerza Pública y policías municipales.
Stephen Madden Barrientos, director de la PCD, reconoció en declaraciones a La Nación que las acciones operativas disminuyeron debido a problemas logísticos del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA), pues no tienen aviones para sobrevolar las montañas en búsqueda de plantaciones de marihuana, principalmente en zonas de difícil acceso, como Talamanca, Limón, en operaciones conjuntas con la PCD y otras fuerzas policiales.
Madden señaló que estas incursiones representan poco menos de la mitad de las operaciones de la PCD, pero que sin aviones disponibles, no se han podido realizar en los primeros seis meses del año.
“Nosotros, recientemente, conversamos con el director de Vigilancia Aérea (Luis Vargas Castillo) y me dio buenas expectativas de que podemos nuevamente reiniciar con estas acciones operativas de sobrevuelos de ubicación y otras que son las que nosotros también realizamos”, declaró el director.
Jonathan Flores Mata, criminólogo y representante sindical del Ministerio de Seguridad Pública, indicó a La Nación que Vigilancia Aérea tiene solo un avión activo, no hay helicópteros y hay cerca de 20 pilotos que no pueden realizar la labor para la que fueron contratados.
Incluso, el 13 de junio, la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) envió un oficio al ministro de Seguridad, Mario Zamora Cordero, en el cual apunta que Vigilancia Aérea “carece de inyecciones reales de más plazas”, y el personal disponible se enfrenta con situaciones referentes a narcotráfico, “para las cuales afirman no han recibido la capacitación adecuada y suficiente, se recargan de trabajo y no cuentan con asesores legales propios de SVA”.
En el documento, solicitaron al ministro que indique si existen planes para dotar de recursos al SVA. La Nación pidió un criterio al SVA desde el pasado martes, a través de la oficina de prensa del Ministerio de Seguridad, pero al cierre de edición no se obtuvo respuesta.
La PCD está adscrita al Ministerio de Seguridad Pública y entre sus atribuciones están investigar los hechos ilícitos relacionados con estupefacientes, sustancias psicotrópicas, drogas de uso no autorizado y actividades conexas. También debe identificar, de manera preventiva, a los presuntos responsables y ponerlos a la orden de la autoridad judicial.
Sobre la caída en las detenciones, Stephen Madden, quien es criminólogo y asumió la jefatura desde mayo del 2022, aseguró que la institución ha expandido su capacidad territorial para enfocarse en más investigaciones en todo el país. Cuando estas concluyan, espera que las cifras se incrementen.
Una justificación similar fue brindada por la entidad cuando los oficiales fueron retirados de puestos fronterizos, muelles y aeropuertos, en setiembre del año anterior. Esta decisión fue cuestionada por el representante sindical del Ministerio, Jonathan Flores Mata, quien denunció un debilitamiento en la lucha contra el narcotráfico.
El ministro Zamora argumentó en aquel momento que el cambio pretende que el rol de la PCD lo asuman otros cuerpos policiales, de modo que el equipo antidrogas se dedique a investigar y judicializar expedientes.
Madden, en entrevista con La Nación, reiteró ese argumento y mencionó la apertura de las delegaciones en Cartago, Heredia y San Carlos, a inicios de este año, como parte de su estrategia para enfocarse en investigar grandes estructuras de narcotráfico, así como grupos de narcomenudeo.
“Estratégicamente, nosotros, para llegar a alguna estructura, lo hacemos de diferentes maneras. Puede ser desde la parte más importante de la estructura, pero también desde su base. Aparte de esto, tenemos algunos casos de investigación singular que tienen una complejidad un poco menor a la investigación de estructuras, pero que están dirigidos a algunos puntos importantes que han sido identificados como puntos donde podemos, eventualmente, incidir en el tema de homicidios”, afirmó.
El director omitió afirmar si las investigaciones aumentaron con respecto al año anterior, aduciendo una supuesta dificultad para recopilar esos datos debido a la cantidad de expedientes que se abren y cierran constantemente. No obstante, indicó que en este 2024 han intervenido 62 organizaciones, de las cuales 56 son costarricenses y seis internacionales con actividad en el país.
PCD abre tres puestos de control sin local físico
La creación de esas delegaciones en Cartago, Heredia y San Carlos, que siguen sin oficina física y con recurso policial de otras oficinas, fue calificada por grupos sindicales como una apertura de departamentos “fantasma”, que estaban recargando las funciones de los oficiales. Así lo señalaron en una carta enviada el 10 de enero al presidente Rodrigo Chaves.
Madden afirmó que desde hace más de una década, la PCD ha enfrentado falta de dinero y personal. Aseguró que necesitan más de 250 agentes de investigación para trabajar en condiciones óptimas.
El jerarca policial manifestó que esperan remediar este faltante, en parte, por medio de la contratación de 100 nuevos agentes, prevista para concretarse entre los últimos meses del 2024 e inicios del 2025. Ellos se sumarían a los cerca de 150 investigadores que ya están activos en la entidad.
