La colaboración entre el Ayuntamiento y la Diputación Provincial permitirá una ambiciosa obra en el Teatro de Aguilar de la Frontera , obra a la que la institución provincial aporta 332.505 euros y que se incluye en el Programa de Planes Provinciales 2020-2023. El Ayuntamiento pondrá 2.337.000 euros. El vicepresidente primero de la Diputación y responsable del Área de Infraestructuras, Andrés Lorite, presentó, junto a la alcaldesa del municipio, Carmen Flores , el proyecto de intervención en este espacio cultural, que ha redactado por la Unidad Campiña del Servicio de Arquitectura y Urbanismo de la propia Diputación. Según Lorite, «nos encontramos ante una actuación de gran envergadura, lo que nos llevará a desarrollar su ejecución en varias fases». No obstante, el proyecto que ahora se ha presentado recoge la totalidad de las obras que se realizarán para el espacio escénico. El solar donde se ubica el teatro, entre las calles Ancha y Altozano y colindando con la iglesia de la Veracruz , alberga actualmente la antigua residencia de mayores, ya en desuso y cuya demolición forma parte del proyecto, como explicó el vicepresidente de la Diputación. Andrés Lorite hizo hincapié en que «la cercanía de la iglesia, declarada Bien de Interés Cultural, ha determinado la viabilidad del proyecto, condicionada por la aprobación por parte de la Delegación Provincial de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía». El proyecto prevé la realización de un edificio de tres plantas, con capacidad para 367 butacas y con una caja escénica adaptada a las exigencias actuales de escenografía, además de varias aulas previstas para el uso de la Escuela de Música. El acceso a las instalaciones se realizará a través de un gran patio, ubicado entre la iglesia y el teatro, espacio de transición entre el interior y el exterior y como elemento de separación entre la iglesia y el espacio cultural. Las futuras instalaciones escénicas recogen, además, la dualidad de materias de piedra y enfoscados, de forma que se plantea en los frentes de fachadas el uso de un basamento de piedra, de tonalidad similar a la existente en la iglesia, marcando las plantas bajas del edificio, sobre las que se eleva el resto de volúmenes, con acabado en enfoscados de color blanco.