La influencer, Aline Ferreira, murió el pasado 2 de julio en una clínica privada en Brasilia; hasta ahora, se sabe que la causa del deceso fue por complicaciones de salud derivadas de un procedimiento estético que la modelo se realizó el pasado 23 de junio en la clínica Ame-se, en Goiânia, Brasil.
De acuerdo con las declaraciones que dio su esposo al medio local g1, la influencer salió del procedimiento y regresó a casa ese mismo día. Sin embargo, comenzó a tener fiebre y dolores abdominales que fueron empeorando hasta que fue llevada de emergencia al Hospital Regional Asa Norte y luego a una clínica privada en Asa Sul, donde falleció por un paro cardiaco.
El esposo de Aline Ferreira informó que en la clínica Ame-se le había dicho que la fiebre y los síntomas que presentaba Aline eran “reacciones normales” posteriores al tratamiento de levantamiento de glúteos con PMMA (polimetilmetacrilato) que se había realizado.
El funeral de Aline Ferreira se programó para el jueves 4 de julio en Campo de la Esperanza de Gama, ubicado en el Distrito Federal, donde su familia, sus dos hijos y sus seres queridos re reunieron desde temprana hora.
“Ella dijo que era algo simple, que no pasaría nada y terminó en toda esta tragedia. Este momento es muy difícil para nosotros, queremos justicia”, dijo María Lima, tía de Aline, a g1.
De acuerdo con informes policiales del caso Aline Ferreira, la propietaria de la clínica Ame-se, Grazielly Barbosa, fue detenida el 3 de julio por la Policía Civil. Incluso, se detalló que la presunta doctora en biomedicina, sin embargo, la detenida, no ha certificado sus estudios y no cuenta con registros, profesionales o técnicos para la realización de este tipo de procedimientos estéticos.
Así mismo, la clínica está clausurada desde la muerte de la influencer y en un cateo realizado por las autoridades no se encontraron registros médicos de pacientes atendidos en el lugar.
De acuerdo con el medio local g1, Aline Ferreira pagó un total de 3 mil reales, equivalente a 9 mil 881 pesos mexicanos, por un procedimiento estético para levantar el trasero; el cual constaba de tres aplicaciones inyectables de 30 ml. de PMMA en cada glúteo, pero Aline murió luego de la primera sesión.
De acuerdo con la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) en Brasil, el PMMA es una sustancia plástica que, por su composición, puede provocar reacciones inflamatorias y hasta necrosis en las zonas donde se aplica; por lo que lo considera al PMMA una sustancia de máximo riesgo.
Aline Ferreira era una influencer brasileña de 33 años de edad que tenía una comunidad de más de 50 mil seguidores en Instagram. Su principal actividad en redes sociales era el contenido de estilo de vida, moda y experiencias de su vida cotidiana.
Aline estaba casada y tenía dos hijos, además, se presentaba en sus redes sociales como modelo fotográfica.
Luego de lo sucedido con su deceso, en su cuenta oficial de Instagram se lanzó un comunicado en el que se puede leer “Aline era una niña soñadora y siempre sonriente y así la vamos a recordar”.
