Hoy se conmemora la figura de Santa Isabel de Portugal, venerada como patrona de la caridad, la paz y la reconciliación familiar
Hoy, jueves 4 de julio, el santoral de la Iglesia Católica conmemora a varios beatos y santos que han formado parte de la historia del cristianismo. Además de ser una forma de honrar a los santos y beatificados, también sirve como una guía para los católicos, que pueden encontrar inspiración en las vidas y obras de estos santos.
Santa Isabel de Portugal, también conocida como Isabel de Aragón, nació en 1271 en Zaragoza, España, hija del rey Pedro III de Aragón y la reina Constanza de Sicilia. Desde joven, mostró una profunda devoción religiosa y caridad hacia los necesitados. A los doce años, fue prometida al rey Dionisio I de Portugal, con quien se casó en 1282. A pesar de las infidelidades de su esposo, Isabel mantuvo una actitud comprensiva y se dedicó a obras de caridad y cuidado de los enfermos y desfavorecidos.
Después de la muerte de su esposo en 1325, Isabel ingresó en la Tercera Orden Franciscana y se retiró al monasterio de las Clarisas en Coímbra, Portugal. Allí, dedicó el resto de su vida a la oración y la penitencia. Falleció el 4 de julio de 1336, siendo reconocida por su vida piadosa y sacrificada.
Santa Isabel de Portugal fue canonizada por el papa Urbano VIII en 1625. Es venerada como patrona de la caridad, la paz y la reconciliación familiar. Su legado perdura en las numerosas obras de caridad que fundó durante su vida, incluyendo hospitales y orfanatos, así como en su ejemplo de compasión y servicio a los más necesitados. Su vida es recordada como un modelo de fe y entrega hacia los demás, inspirando a generaciones de católicos en todo el mundo.
