Florencia Gallo, una joven de Rosario, Argentina, se convirtió en un fenómeno viral dentro de las redes sociales tras confesar que, después de ser despedida de su trabajo en una clínica odontológica, eliminó la base de datos digital de la empresa como represalia. Gallo explicó que realizó el vengativo accionar luego que fuera despedida por pedir un aumento salarial tras haberse mantenido durante dos años sin un contrato formal.
"Después de dos años trabajando en negro, me echaron por pedir un aumento. Ahora verán cuánto cuesta digitalizar y automatizar todo", explicó la joven mediante el video que publicó en su cuenta de TikTok. "A mí me habrán echado, dejándome sin saber cómo pagar el alquiler, sin saber cómo hacer para comer, pero por lo menos yo no soy tan idiota para no darme cuenta de que no tengo que romperle las pelotas al que creó mi base de datos porque yo ahora… la borré toda", agregó la joven.
De acuerdo con Gallo, si bien la información que borró se encuentra registrado en documentos que la empresa mantiene guardados en cajas, al borrar la base de datos digital eliminó toda posibilidad de accesibilidad rápida. “Ahora solo cuentan con registros físicos de puro papel que está distribuido en cajas y muebles y ya la información, aunque exista, es menos accesible”, indicó la joven durante el video.
Ante la lluvia de críticas recibida mediante TikTok y X, antes Twitter, la joven reveló que dos días después decidió devolver la base de datos con la finalidad de no perjudicara a la lista de pacientes con historial médico dentro de la clínica odontológica. "Yo ya sabía cuál iba a ser mi destino. Iban a hablar mal de mí y yo decidí con qué", explicó la joven en un segundo video que publico en sus redes sociales.
Por otra parte, Florencia agregó más razones que la orillaron a tomar la drástica decisión de borrar los datos en primera instancia. "Me quedé sin empleo, sin saber cómo pagar el alquiler, sin saber cómo hacer para comer", señaló la joven, quien también explicó que aún se mantiene en búsqueda de un nuevo trabajo y de no sentirse una mala persona, pues sus acciones se dieron en respuesta de una maltrato.
El video en el que Florencia narra su acto de venganza ha acumulado más de 280 mil reproducciones y recibió alrededor de 17.000 "me gusta". Aunque muchas personas criticaron su comportamiento, la publicación también provocó un debate sobre las condiciones laborales y la precarización del empleo. La magnitud de la respuesta en las redes sociales puso en el centro del debate la vulnerabilidad de quienes trabajan sin un contrato formal.
