Donald Trump, expresidente de EU, dijo que de regresar a la Casa Blanca, terminará con la guerra entre Rusia y Ucrania en enero.
El presidente Volodimir Zelenski exigió este 3 de julio a Donald Trump que presente su plan para poner fin a la guerra de Ucrania con Rusia, y advirtió que cualquier propuesta no debe violar la soberanía de su nación.
“Si Trump sabe cómo terminar esta guerra, debería decírnoslo hoy”, declaró Zelenskiy en una entrevista de Bloomberg Television en Kiev este miércoles. “Si hay riesgos para la independencia de Ucrania, si perdemos la condición de Estado, queremos estar preparados para ello, queremos saberlo”.
Donald Trump, que lidera las encuestas sobre el presidente Joe Biden antes de las elecciones de noviembre, se ha jactado de que pondrá fin a la guerra entre Ucrania y Rusia cuando asuma el cargo en enero. En el debate televisado de la semana pasada, Trump condenó los miles de millones de dólares gastados en la defensa de Ucrania y dijo que Kiev “no está ganando la guerra”.
En una entrevista de casi una hora, el líder ucraniano lamentó los retrasos en las entregas de armas por parte de los aliados occidentales y dijo que estaba “potencialmente listo” para reunirse con Trump para escuchar las propuestas de su equipo.
“No pueden planificar mi vida y la de nuestro pueblo y nuestros hijos”, criticó. “Queremos entender si en noviembre contaremos con el poderoso apoyo de Estados Unidos o si estaremos completamente solos”.
El líder ucraniano ha tenido una relación tensa con Trump, quien durante su presidencia acusó constantemente a Zelenski de corrupción y poco después de las elecciones de 2019 del excomediante se apoyó en él para investigar las acusaciones contra Biden, una medida que desencadenó su primer juicio político.
Zelenski también cuestionó la idea de que Kiev esté perdiendo ante Vladimir Putin, refutando el término “punto muerto” para describir el conflicto. Dijo que las fuerzas de Kiev están mejor posicionadas en términos de mano de obra que hace meses y que una nueva contraofensiva es una cuestión de armar a sus brigadas.
“No es un punto muerto, es una situación problemática”, afirmó. “Un punto muerto significa que no hay salida, pero un problema puede resolverse si uno tiene la voluntad y las herramientas. Tenemos la voluntad y las herramientas; aún no han llegado”.
A medida que la invasión a gran escala del Kremlin avanza hacia su tercer año, el Ejército ruso ha explotado las cada vez más menguantes reservas de armas y municiones, y ha logrado avances incrementales desde principios de año.
Si bien Zelenskiy elogió el paquete de asistencia de 61 mil millones de dólares aprobado por el Congreso de Estados Unidos este año (después de un largo retraso de seis meses), remarcó que el equipo estaba tardando demasiado en llegar al frente.
“Esta es la mayor tragedia de esta guerra: Entre la decisión y los hechos reales, tenemos una espera muy, muy, muy larga”, agregó.
