2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla picada
2 dientes de ajo picados
1 taza y media de espinaca trozeda
500 g de champiñones laminados
1 cucharada de jengibre rallado
4 tazas de caldo de verduras
1 taza de arroz yamaní
1/2 taza de crema de leche o queso crema (opcional)
Sal y pimienta al gusto
Calienta el aceite de oliva en una olla grande a fuego medio.
Agrega la cebolla y el ajo y cocina hasta que estén tiernos.
Incorpora los champiñones y el jengibre y saltea durante unos minutos hasta que esten bien dorados. Finalmente agrega la espinaca y saltea hasta que empieza a achicharrar.
Vierte el caldo de verduras y lleva a ebullición.
Agrega el arroz yamaní, reduce el fuego y cocina a fuego lento durante 20 minutos, o hasta que el arroz esté cocido.
Retira del fuego, agrega la crema de leche (si la usas) y sazona con sal y pimienta al gusto. Sirve caliente y disfruta de una sopa deliciosa y nutritiva que te ayudará a combatir los resfriados.
TIP para una sopa aún más cremosa: Licúa la mitad de la sopa hasta obtener una textura homogenea, mezclala con una cuarta parte de la sopa no procesada y reserva lo restante. La mezcla entre ambas aportara textura y mayor cremosidad a la vez.
Aporte nutricional: Esta sopa es rica en vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. Los champiñones son ricos en beta-glucanos, que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico. El arroz yamaní es una fuente de fibra integral y el jengibre tiene propiedades antiinflamatorias.
Puedes agregar otras verduras a las recetas, como espinacas, zanahorias o pimientos.
Para darle un toque especial a la sopa de champiñones, puedes agregar un poco de parmesano rallado o perejil fresco al final. Recuerda que estas son solo algunas ideas para comenzar. Puedes adaptarlas a tus gustos y necesidades. ¡Buen provecho!
