Un estudio del Instituto de Física Nuclear de la Academia Checa de Ciencias (CAS) y el Instituto de Arqueología de la CAS señala que los humanos ocuparon Europa mucho antes de lo que los especialistas habían sugerido.
La nueva estimación de los científicos surge del análisis de herramientas paleolíticas que fueron encontradas en Korolevo, que sería actualmente cerca de Ucrania y Hungría.
Un grupo de investigadores internacionales encontraron en Korolevo herramientas rudimentarias hechas de piedra estratificada, que fueron utilizadas por los primeros humanos que habitaron la zona.
Por medio de la investigación y de acuerdo con los modelos climáticos, la migración del Homo erectus a Europa probablemente sucedió durante tres momentos, específicamente entre los períodos cálidos interglaciares.
"Nuestro primer ancestro, el Homo erectus, fue el primero de los homínidos en abandonar África hace unos dos millones de años y dirigirse a Oriente Medio, Asia Oriental y Europa", señaló Roman Garba, el autor principal del estudio.
Clasificación de las herramientas paleolíticas halladas en Korolevo.
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El equipo determinó la antigüedad de estos elementos por medio de técnicas avanzadas de múltiples disciplinas como la física nuclear, la matemática y la geofísica. También, durante la investigación se utilizó un nuevo método de datación aplicado en arqueología.
La evidencia encontrada en Korolevo sugiere que los primeros humanos llegaron a Europa desde el este o el sureste entre los períodos cálidos interglaciares aunque todavía no se hallaron restos humanos en la zona de excavación.
Científicos encargados de analizar las herramientas halladas.
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Este nuevo estudio cambia la perspectiva sobre cómo fueron las rutas de dispersión de los "primeros europeos". También completa una pieza faltante sobre la historia del primer grupo humano de Europa.
Los hallazgos de Korolevo fortalecen la hipótesis que sostiene que Europa fue colonizada desde el este. Además, contribuye a entender mejor la dispersión y rutas de los humanos.
Las herramientas encontradas fueron fundamentales para entender la tecnología y las capacidades de los primeros homínidos en Europa. Así también, ayudaron a reconstruir la cronología de la ocupación humana en el continente.
Mapa de la ruta que habrían realizado los primeros humanos para llegar a Europa.
