Son las 16:30 horas de la tarde del pasado martes, 25 de junio, en Bruselas. En una de las salas del Parlamento Europeo, sentados en una mesa lila, Félix Bolaños y Esteban González Pons mantienen una última conversación. Una última reunión tras cientos de mensajes, llamadas y encuentros para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) repartidos a lo largo de casi dos años. Son testigos de excepción el primer presidente de la República Checa, Václav Havel, y la periodista rusa asesinada en 2006 Anna Politkóvskaya, cuyos cuadros cuelg ...