La figura del economista y exsecretario de Comercio del kirchnerismo Guillermo Moreno no deja de crecer dentro del peronismo. Gracias a una fuerte estrategia de redes y una militancia joven que lo llama "loco", el dirigente propone hoy "hacer a la Argentina grande otra vez".
¿Dónde empiezan y treminan las similitudes con el fenómeno que llevó a la presidencia a Javier Milei? ¿Quién es la vieja cara de la nueva política que pretende reorganizar al peronismo?
Moreno fundó su partido, Principios y Valores (PyV), en octubre de 2020 y no llegó a pasar las primarias abiertas y obligatorias (PASO) en las elecciones de 2023. El partido morenista apenas rozó el 0,79%, lo cual dejó al economista lejos de la presidencia.
Sin embargo, un año después, el dirigente parece haber conseguido una centralidad impensada años anteriores dentro del peronismo.
Hace tres semanas, el dirigente llevó a cabo un acto multitudinario en la cancha de Ferro para presentar su "plan económico" y de esta manera materializó una militancia desarrollada al calor de las redes y los grupos de WhatsApp.
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Allí el exfuncionario realizó una arenga al público propia de un animador y se cantó una canción que se hizo viral en las redes sociales y es una reversión de un jingle de campaña del peronismo en la vuelta de la democracia: "Traigan al gorila de Milei, para que vea que este pueblo no cambia de idea, lleva la bandera de Evita y Perón".
Paralelamente, esta semana logró llevar a cabo un encuentro de economistas de las distintas facciones del Justicialismo para seguir adelante con su plan de reorganizar un peronismo todavía herido por la pérdida en las elecciones presidenciales.
El reencuentro tuvo lugar en el Palacio Barolo el jueves pasado y contó con la presencia del exsecretario de Comercio Roberto Feletti en representación de Axel Kicillof, el economista Santiago Fraschina por La Cámpora y por el Frente Renovador, Eduardo Setti.
Según pudo averiguar El Cronista, el mitin tuvo como objetivo desarrollar un plan económico conjunto para contrarrestar la política de ajuste libertaria y trabajar en pos de "una Argentina industrial". Para el dirigente, el peronismo debe "pedir una reunión al FMI" para explicar su proyecto político de reindustrialización.
Asimismo, también sostuvo la importancia de pedir una reunión al movimiento obrero y a los sectores económicos relevantes para explicar la posición del peronismo.
Principios y Valores organiza semanalmente encuentros de militancia en distintos puntos del conurbano y la Ciudad de Buenos Aires. El sábado 15 de junio se llevó a cabo un evento en la Sociedad de Fomento de Parque Alvear, en la localidad bonaerense de Ituzaingó.
El peronista entró al acto rodeado de militancia al ritmo de "Ahí viene Moreno, que loco que está", los asistentes se atropellaron unos a otros buscando una foto o un saludo del dirigente. Esta descripción bien podría haber sido de la militancia libertaria durante la campaña presidencial de Javier Milei pero no, ocurrió durante un acto pequeño realizado en el corazón de zona Oeste.
Por su parte, Javier Milei inició su campaña a diputado nacional con "recorridas" por distintos barrios de la Capital, acompañado de sus principales referentes libertarios de ese momento y una minúscula militancia de redes sociales que crecería más tarde y lo llevaría a la Presidencia.
Además, el fenómeno del economista excéntrico creció al calor de los medios y sus frecuentes intervenciones en programas de televisión como panelista. Moreno tiene hoy una participación principal como panelista en C5N, una columna en el stream kirchnerista Gelatina y un programa propio los domingos en Radio 10.
La juventud de Principios y Valores, como lo hicieron los reconocidos twitteros de Javier Milei, se encargan de subir memes y videos recortados de las declaraciones de Moreno en sus diversas intervenciones televisivas. Sin embargo, quizás es allí donde los parecidos terminan.
El economista peronista no es un amateur en términos políticos: gestionó durante siete años laSecretaría deComercio durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. Allí se estableció con fama de "duro" y cuenta con diversas anécdotas, que él mismo desmintió, sobre su accionar al borde del reglamento.
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Por otro lado, mientras las palabras que más seguido repetía el presidente Javier Milei durante sus discursos eran "casta" o "inflación", en los actos morenistas la palabra que más se repite es "trabajo" y "salario". No es una casualidad en la búsqueda de perfilar un candidato con valores opuestos.
El proceso de desaceleración inflacionaria que se refleja en las mediciones oficiales y privadas también encuentra una lectura coincidente en la evaluación de la sociedad ya que, luego de dos años, la inflación dejó de ser la principal preocupación de los argentinos, de acuerdo al relevamiento nacional del Equipo Mide.
El estudio, correspondiente a mayo, reveló que "por primera vez en 24 meses de mediciones sistemáticas mensuales, la inflación pasa del primer al segundo lugar dentro de las principales preocupaciones de la sociedad". Pero ahora crece el temor a perder el empleo.
"Cuando se cerraron fábricas los dueños se llenaron de plata y nosotros de pobres, la pobreza es la falta de trabajo", afirmó el líder peronista durante el encuentro su encuentro con la militancia.
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Además, a pesar de ser un encuentro de militancia, durante el acto de Moreno se hicieron presentes militantes del Movimiento Evita. Si bien es una militancia surgida en redes y no responde al Partido Justicialista Nacional, parecería sostener algunas prácticas tradicionalmente peronistas como un aparato en la provincia de Buenos Aires.
Además, durante el acto se le dio lugar a diversos dirigentes zonales como Alberto Visconti y Natalia Peluso. Los dirigentes se extendieron por un largo tiempo, antes de que Moreno tomara la palabra, distinto a los actos dónde Milei era esencialmente el único orador.
El último jueves, los fiscales federales Diego Luciani y José Ipohorski apuntaron contra el dirigente de manipular los índices del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC) durante su gestión como secretario de Comercio con el objetivo de falsear los datos de la inflación. En el juicio que se le sigue, pidieron cuatro años de prisión y diez años de inhabilitación para ejercer cargos públicos.
Moreno está acusado por los delitos de abuso de autoridad, violación de secretos, destrucción de registros y documentos y falsedad ideológica de documentos públicos reiterados en siete oportunidades.
El Tribunal pidió la misma condena de Moreno para la exdirectora del IPC del INDEC Beatriz Paglieri, y dos años de prisión en suspenso y cinco de inhabilitación para las empleadas Marcela Filia y María Celeste Cámpora Avellaneda.
La investigación se inició en 2007 por la denuncia formulada por el abogado de la asociación civil sin fines de lucro "Asamblea por los Derechos Sociales" respecto a una serie de publicaciones periodísticas que daban cuenta de las circunstancias y el contexto en el que se habría desplazado a la entonces directora del IPC, Graciela Bevacqua.
De acuerdo con ello, Moreno le habría ordenado a la funcionaria que le revelara los datos correspondientes a los comercios sobre los cuales se efectuaban los estudios de campo para establecer los índices inflacionarios, a fin de "visitar" esas firmas.
Como Bevacqua se habría negado a ello -amparada en el secreto previsto en la Ley 17.622 de Estadística y Censo-, Moreno la habría reemplazado por Paglieri. El denunciante también advertía sobre una adulteración y/o manipulación del índice inflacionario publicado por el INDEC en enero de 2007.
