En abril los salarios privados subieron un 10,2%, según el Indec, lo que da cuenta de una recuperación para el mes por encima de la inflación. Sin embargo, el consumo registró su peor mayo desde la pospandemia con un derrumbe del 7,7% interanual.
El consumo cayó en mayo un 7,7% en comparación con el mismo mes del año pasado, la mayor caída registrada por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) desde febrero de 2021, cuando empezó el proceso de recuperación de la pandemia.
En comparación con abril, la caída fue de 2,2%, descontando los efectos estacionales, mientras que en los primeros cinco meses del año, el consumo acumula una caída del 4,3%.
Desde la CAC destacaron que "aunque en los últimos dos meses la variación de los salarios registrados aumentó por encima del IPC, esto aún no se ha reflejado en el consumo". "La reducción del ingreso real se mantiene a nivel agregado y esto genera la caída del consumo de las familias", agregaron.
Los salarios subieron un 10,2% en abril, según el Indec, 2 puntos por encima de la inflación para el mismo mes. La suba se explicó por el aumento en los salarios privados registrados, que en el mes subieron un 12%, ya que restaron en la variación los salarios públicos registrados (7,5%) y los privados no registrados (7,8%).
En lo que va del año, los salarios acumulan un alza del 60,3%, contra una inflación del 65% para el mismo período. En el caso de los salarios privados registrados treparon un 68,5%, mientras que los privados informales lo hicieron en un 39,1% y los del sector público en un 54%.
En la variación interanual, los salarios en su conjunto subieron 213,6%, contra una inflación interanual del 289,4% en el mes. En comparación con el mismo mes del año pasado, los salarios privados subieron un 247,6%, los del sector público un 193,1% y los privados informales un 135,6%.
Según la CAC, el ingreso promedio en mayo fue de $1.084.000, lo que representa una caída interanual del 21% en el poder de compra.
"Si bien la tasa de inflación continúa desacelerándose, esto se debió a que los incrementos tarifarios de gas y electricidad pautados para el mes de mayo fueron postergados y tendrían lugar durante el mes de junio", dijeron desde la CAC y analizaron que podría tener un efecto sobre el poder de compra de las familias.
Cuestionaron además una recuperación del poder de compra si se vuelve a acelerar la inflación y agregaron: "Los incrementos de AUH y tarjeta alimentar y la persistencia de bonos a jubilados parecen no ser suficientes para recomponer el poder de compra de los sectores más vulnerables".
Recreación y cultura se derrumbó un 42,6% mientras que en indumentaria y calzado se registró una caída del 27% interanual, explicado por la caída del ingreso real de los hogares y las deudas con tarjetas de crédito que se tradujo en la postergación de consumos no fundamentales.
En transporte y vehículos la caída interanual fue de 11,3%, explicado fundamentalmente por los menores patentamientos -8%), el encarecimiento del precio de la nafta y las menores ventas de combustibles.
Vivienda, alquileres y servicios públicos tuvo un aumento del 6,3%, explicado por la mayor demanda de energía por las temperaturas más bajas registradas este año. En mayo se dio la semana en la que peligró el suministro de gas a las industrias por la mayor demanda en los hogares a raíz de la ola de frío.
En el resto de los rubros, la caída fue de 3,7% interanual y 1,8% debajo de los niveles pospandemia.
