En la búsqueda constante de una piel radiante y suave, cada vez más personas centran su atención en mejorar su alimentación y adoptar cuidados específicos.
Este aumento en el interés refleja una tendencia hacia prácticas que no solo embellecen, sino que también promueven la salud cutánea desde adentro hacia afuera.
La conexión entre la dieta equilibrada y los cuidados adecuados se posiciona como clave para alcanzar una piel con un brillo natural y una textura impecable.
La doctora Carmen Galera, dermatóloga especializada en flacidez facial, construyo una sólida comunidad en redes sociales, destacándose en Instagram bajo el perfil @dermaforyou, donde cuenta con más de 122.000 seguidores.
A los 48 años, esta residente de Madrid exhibe una piel envidiable que desafía su edad aparente, lo cual refuerza la admiración de sus seguidores por su enfoque en el antienvejecimiento natural y respetuoso.
Según la dermatóloga Carmen Galera, existen cinco alimentos clave para mejorar la salud de la piel, los cuales deberíamos incorporar más frecuentemente en nuestra dieta semanal:
Estos alimentos son especialmente ricos en magnesio, vitamina D y omega-3, nutrientes esenciales para la piel según explica la experta.
Recomienda considerar suplementos si no se consumen con regularidad:
Una dieta enriquecida con estos nutrientes no solo mejora la salud y la apariencia de la piel, sino que también ayuda a retardar los signos habituales del envejecimiento cutáneo.
El caldo de huesos, preparado a partir de huesos de diversos animales, se destaca como una de las mejores fuentes de colágeno. Estos huesos, ricos en tejidos conectivos como cartílagos y tendones, aportan una gran cantidad de colágeno y otras proteínas esenciales.
Desde la Clínica Gaztambide resaltan que "el caldo de huesos es la mejor fuente de colágeno" y agregan que las proteínas presentes en este caldo son altamente biodisponibles.
"Cuando se consume, el cuerpo puede absorber y utilizar estas proteínas de manera inmediata", explican los especialistas.