Ante un posible fichaje de Michael Olise, el tiempo de Kingsley Coman en FC Bayern München podría llegar a su fin. El extremo francés ya no tendría sería indiscutible en el Allianz Arena, busca nuevos desafíos y podría regresar a Paris Saint-Germain.
El gran objetivo de FC Bayern München es dar un golpe sobre la mesa en este mercado de fichajes, después de cerrar la pasada temporada sin ningún título. El primer refuerzo, Hiroki Ito de Stuttgart, fue sorprendente y van a seguir por ese camino ya que, como afirma Fabrizio Romano, Los Bávaros van a pagar la cláusula de rescisión de Michael Olise, extremo inglés de Crystal Palace, de más de 45 millones de libras.
Hacer fichajes de peso implica salidas, y el favorito para marcharse es Kingsley Coman. Según BILD, el atacante galo quiere un nuevo reto en su carrera deportiva y Bayern está dispuesto a dejarle salir si llega una buena oferta. De momento, el club mejor posicionado para hacerse con él es PSG, que ya ha contactado con el que fuera en su momento un producto de su cantera, pero aún no ha habido charlas con los muniqueses.
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Los caminos de Kingsley Coman y FC Bayern se cruzaron en 2015. Inicialmente era una cesión por dos temporadas, pero en 2017 se cerró su fichaje permanente por 21 millones de euros. En nueve temporadas ha logrado levantar ocho títulos de Bundesliga, tres DFB Pokal y la Champions League de 2020, donde marcó el gol en la final contra, precisamente, PSG. Junto a Serge Gnabry tomó el testigo de Robben y Ribéry en las bandas bávaras tras las retiradas de estos últimos, y ahora el club ha decidido que sea otro quien ocupe ese lugar. A sus 28 años, todavía le queda mucho fútbol por demostrar a Coman, pero puede que ya no lo haga en la Bundesliga.
