La Secretaría Nacional Técnica Ambiental (Setena) anunció este 25 de junio al nombramiento temporal de Andrés Cortés Orozco como secretario técnico de la entidad. Él se desempeñaba como coordinador de Planificación Institucional.
Esta designación se da luego de que el titular del cargo, Ulises Álvarez Acosta, fuera detenido como parte de una investigación por supuestas anomalías en el otorgamiento de permisos ambientales, bautizada como “caso Comején”. La diligencia judicial se realizó el 18 de junio; cuatro días después se dictó la suspensión del cargo como medida cautelar, sin que se ordenara prisión preventiva en su contra.
Junto con Álvarez fueron detenidos otros dos funcionarios de Setena de apellidos Quirós Brenes y Gutiérrez Durán.
En su lugar, Setena nombró, también de forma temporal, a Nuria Chavarría Campos en la Coordinación Técnica. Ella es trabajadora del área de Evaluación Ambiental Estratégica (EAE) y se ha enfocado en el trabajo con los Planes Reguladores de las Municipalidades.
Entretanto, la coordinación a.i de la Dirección de Tecnología de Información (IT) del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) se recargará a otros funcionarios de esta área.
A través de un comunicado de prensa, el ministro de Ambiente y Energía, Franz Tattenbach Capra, señaló que el Ministerio se mantiene a disposición de las autoridades judiciales.
Los tres funcionarios de la Setena fueron detenidos junto con un empresario de apellidos Murillo Martínez en una serie de allanamientos. Se les investiga por los delitos de tráfico de influencias, cohecho propio e impropio y penalidad del corruptor.
Presuntamente, los trabajadores públicos habrían recibido pagos a cambio de otorgar permisos a empresas.
Álvarez, Quirós y Gutiérrez fueron suspendidos de los cargos de manera cautelar, mientras que a Murillo se le prohibió realizar contratos o gestiones ante Setena.
Por esta causa se investiga a un total de nueve personas.