El eurodiputado electo Alvise Pérez Fernández ha acusado este martes a Vox de ejercer «bullying institucional» contra su agrupación, Se Acabó La Fiesta (SALF) y de «bloquear cualquier negociación o posible inclusión» de SALF en el Grupo de los Conservadores y Reformistas (ECR), el grupo de los de Jorge Buxadé en el Parlamento Europeo. En su canal de Telegram, Alvise ha afirmado que Buxadé «ha exigido» a sus aliados europeos que Vox «sea la única delegación española» en el grupo de ECR y le acusa de «compartir» con ellos «el bulo» de que SALF se integrará en otro grupo con la ultraderecha alemana de Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán). También ha asegurado que Santiago Abascal le ha bloqueado en la aplicación de mensajería WhatsApp y ha subrayado que Vox «afirma en público todo lo contrario a lo que hace en la realidad»: «Sólo recibimos de ellos insultos, desprecio y bullying institucional», ha añadido. El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente a este mes de junio confirmó la pasada semana que el votante medio de Se Acabo la Fiesta es un hombre joven que se autodefine de derechas y de clase baja, y que en las anteriores generales o bien no tenía edad para votar o cogió la papeleta de Vox. Tras las europeas, sectores del PP admitieron cierta inquietud por la irrupción en el Parlamento Europeo de la agrupación de Alvise, al tiempo que alertaron de que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, lo va a usar como un nuevo ariete contra Alberto Núñez Feijóo. En este escenario, las fuentes consultadas por Europa Press coinciden en que hay que «ignorarle».