La desocupación trepó al 7,7%, en el primer dato oficial de la era Milei. A fines del año pasado era de 5,7%. Hacia adelante, analistas esperan que empeore la situación, pese a la flexibilización que se prevé en la ley bases.
Este lunes se conoció el primer dato oficial sobre el mercado de trabajo de la presidencia de Javier Milei. En un contexto de fuerte caída de la actividad económica, la tasa de desocupación trepó al 7,7% durante el primer trimestre del 2024. Implica dos puntos más que en el último trimestre del 2023 (5,7%), última etapa del gobierno de Alberto Fernández.
Hacia adelante, expertos en temas laborales consultados por El Cronista esperan un empeoramiento en la pérdida de puestos de trabajo, inclusive aunque empiece a regir la reforma laboral que se prevé en la ley bases, a la espera de los últimos trazos en el Congreso.
Extrapolando con los datos relevados por Indec, hay 185.000 nuevos desempleados respecto a un año atrás, analizó la consultora LCG. En el conurbano, la tasa de desempleo se acercó a los dos dígitos, y llegó al 9.9%.
Al poner la lupa sobre el dato de desempleo, el economista Federico Pastrana advirtió que "se destruyeron más puestos no registrados, no calificados y con menor nivel educativo". A nivel sectorial, "industria y construcción fueron los más castigados".
Sobre el informe, Luis Campos, abogado e investigador en temas laborales, aseguró que el aumento de la desocupación a 7,7% implica una suba de 0,8 puntos contra el mismo período del año anterior, lo cual lo ubica "en un rango similar" a lo sucedido en años anteriores. "Es importante, pero no llega a ser la más elevada del período reciente. Queda segunda luego del aumento interanual entre el 2018 y 2019", analizó.
El dato puntual que resaltó fue el de la presión sobre el mercado de trabajo, que saltó del 26,9% al 29,5%. Allí están los desocupados, pero también las personas que tienen trabajo y demandan más empleo. "Esto se explica fundamentalmente por los ocupados demandantes que, caída salarial mediante, buscan más trabajo", indicó Campos.
Si bien los datos son del primer trimestre, consideró que no se verá una mejoría en el segundo trimestre (abril-junio), sino lo contrario. "Para que el empleo se recupere va a tener que empezar a crecer la actividad, y al menos en el corto plazo no se ven los drivers", agregó.
Por otro lado, Luis Beccaria, investigador, docente y ex director del Indec, puso la lupa en la tasa de participación económica, que son las personas de 14 años o más que trabajan o buscan trabajo. "La caída fue muy significativa, de 61,4% a 60,5%", afirmó. Los motivos: "Personas que se retiran del mercado de trabajo, quizás ante las dificultades para encontrar empleo".
A este factor, Haroldo Montagu, de la consultora Vectorial, lo llamó "desempleo encubierto", es decir, personas que todavía no están en la categoría de desocupados, lo cual podría haber incrementado la cifra. "Cayó la tasa de actividad, por lo que cabe preguntarse, si esas personas seguían en actividad, ¿estarían empleadas o no? Podrían haber decidido dejar de buscar y pasar a la inactividad ante la expectativa de lo que podría ser una recesión prolongada".
Sobre proyecciones hacia adelante, el Fondo Monetario Internacional (FMI), que a principios de año estimaba una desocupación del 8% hacia fin de año, ahora en el último staff report lo empeoró y lo llevó a 8,2%. El REM que releva el Banco Central, que estimaba una desocupación de 7,4% para el primer trimestre, espera que aumente a 7,6% para cerrar el primer semestre, y volver a bajar a 7,5% hacia el tercero.
En la misma línea, Matías Ghidini, CEO de la consultora de trabajo GhidiniRodil, anticipó una tendencia al alza hacia adelante. "El segundo y tercer trimestre la desocupación va a estar más cerca del 9%, y en el mejor de los casos, a fin de año podría amesetarse", analizó.
Ante la consulta de qué impacto podría tener la reforma laboral que está en la ley bases, a punto de ser sancionada por el Congreso, Ghidini consideró: "Las modificaciones de la ley bases son cimientos para construir un mercado laboral mas moderno, pero por si solos no van a generar más trabajo. Van a atacar otros problemas como la informalidad y la industria del juicio. Pero sobre eso falta una reactivación económica".
De todos modos, desde LCG consideraron que en el segundo trimestre es posible que se pueda ver una "atenuación de la desmejora, debido a una eventual mejora (leve) de los indicadores de actividad". Sin embargo, también dijeron que es posible que la mejora sobre la tasa de desempleo se vea un poco mermada por el aumento de la población económicamente activa. Y agregaron que "aún restan ajustes de precios relativos que seguramente impacten en el nivel de actividad".
