La crisis de seguridad que vive Ecuador ha llevado al inicio de la construcción de una nueva cárcel de máxima seguridad para 800 presos, aseguró el presidente Daniel Noboa. El recinto, que tendrá un costo de 52 millones de dólares, contará con un modelo similar al implementado por la gestión de su homólogo salvadoreño Nayib Bukele.
"Hoy marcamos uno de los hitos más importantes en nuestra lucha contra el terrorismo y las mafias que se enquistaron impunemente en nuestro país durante décadas", señaló Noboa desde Santa Elena, localidad que albergará la cárcel que ya está en construcción.
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Daniel Noboa expresó su deseo de construir dos grandes cárceles de máxima seguridad tras asumir la presidencia en noviembre de 2023. Según señaló, una de ellas se encontrará en la Amazonía, mientras que la otra estará en la costa del Pacífico. Ambos recintos estarían inspirados en la edificada por Bukele para combatir las pandillas de El Salvador.
La nueva cárcel de Ecuador tendrá un tamaño de 16,2 hectáreas y, según el general Luiz Zaldumbide, director del organismo encargado de administrar las prisiones (SNAI), se construirá en "un tiempo récord" de 300 días.
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Además, se edificarán seis torres de vigilancia de 9,5 metros de alto y una muralla de nueve metros. Para garantizar la seguridad, se instalarán bloqueadores de señal de telefonía e internet y circuito cerrado de televisión.
"Gracias a su despliegue tecnológico de vanguardia, que incluye sistemas de videovigilancia enlazados a software de inteligencia artificial, este centro no solo será el primero en su tipo en el país, sino que también establecerá nuevos estándares en la categorización de las personas privadas de libertad según su nivel de peligrosidad", agregó Luiz Zaldumbide.
En la actualidad, ya existe una cárcel de máxima seguridad denominada La Roca, la cual tiene una capacidad de 160 reclusos y está ubicada en el puerto de Guayaquil, principal punto de salida de la droga hacia Estados Unidos y Europa. Además, hay 36 cárceles, aunque más pequeñas.
La nueva cárcel de Ecuador ha generado polémica incluso antes de iniciar las obras de su construcción. Según el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH), los alrededores del predio cuentan con un bosque primario y restos arqueológicos, por lo que sus pobladores han mostrado su descontento.
En declaraciones para la agencia AFP, el comunero Donald Cabrera señaló que la cárcel es "un peligro inminente para todas las comunidades que son territorios de paz y los quieren convertir en zonas de guerra".
