Opel ha resucitado un nombre legendario de su porfolio, el Frontera. Ahora, el coche no es el capaz todoterreno que se dejó de producir en 2007 -desde la marca afirman que no está prevista una versión con tracción a las cuatro ruedas-, pero llega con la intención de convertirse en uno de los grandes contendientes del reñido mercado de los B-SUV. Además, es de los pocos modelos en esta categoría que llega con la posibilidad de transportar a siete ocupantes , con una tercera fila adicional de asientos en el maletero -el otro es el Citroën C3, con el que comparte la plataforma Smart car-. El espacio para la familia es uno de los reclamos del nuevo Frontera, que cuenta con 460 litros de maletero y la posibilidad de expandirlos hasta los 1.600. El Frontera llegará en dos motorizaciones: una híbrida ligera de 100 y 136 CV, así como una eléctrica de 83 kW (113 CV), con una batería de 44 kWh, lo que le dota de una autonomía de 310 kilómetros. En 2025 se prevé que llegue otra versión de 54 kWh capaz de superar los 400 kilómetros. Este todocamino, además, llega con la novedad de prescindir del sistema multimedia en el nivel de acabados más bajo : ofrecerá un soporte para el teléfono en la consola, que se conectará a través de Bluetooth al coche. Esto permite a Opel ofrecer el modelo por menos de 22.000 euros con descuentos de lanzamiento. Los que quieran optar por la pantalla central, tendrán que pagar unos 3.200 euros más.
