La Confederación Andaluza de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado por la Educación Pública (Codapa) ha lanzado una contundente crítica acerca de la calidad de los menús que los pequeños consumen en los centros educativos públicos de la región, como «llevan años trasladando a la administración las familias» en forma de quejas y reivindicaciones «que han caído en saco roto». Aluden incluso a un incumplimiento de las directrices europeas de Compra Pública Verde . La raíz del problema, explican, es que «las empresas de catering -19- que dan servicio a los 1.500 comedores funcionan mediante cocinas centrales desde las que se distribuye la comida, refrigerada y envasada en barquetas de plástico , a cientos de kilómetros donde, al cabo de los días, se recalienta en esos mismos envases». Así, recogen el pensamiento de que la alimentación resultante es «altamente contaminante» y de «escasa calidad tanto de la materia prima como del proceso de elaboración, refrigeración y recalentamiento» . Como «no satisface a quienes la consumen» -aseveran- se termina produciendo «un desperdicio alimentario inaceptable». Desde la Junta, la respuesta es tajante: «los menús que se sirven en los comedores escolares públicos andaluces siguen todas las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y de la Consejería de Salud y Consumo en cuanto a alimentación saludable». Abundan en que «promueven una alimentación completa y equilibrada que, entre otros aspectos, se caracteriza por la presencia diaria de la verdura y la fruta fresca ; el uso de aceite de oliva virgen extra ; una mayor proporción de pescado que de carne, que debe ser magra; la limitación de los alimentos precocinados y fritos ; y la apuesta por la dieta mediterránea y los productos ecológicos». Además, certifican la calidad a través del plan Evacole , cuyos técnicos «comprueban mensualmente su adecuación a los criterios nutricionales y de calidad establecidos en los pliegos y, además, realizan verificaciones in situ en los centros educativos, que se suman a las auditorías que también realiza la Agencia Pública Andaluza de Educación ». No es una situación que acabe de producirse, pero sí que para Codapa se «agrava» y «perpetúa» con la nueva licitación prevista para los dos próximos cursos. En ese sentido, la confederación de padres realiza la reivindicación junto a Justicia Alimentaria -institución tras una reciente campaña financiada por el Gobierno central que causó polémica por presentar fruta podrida -. Ambas evidencian que «en Andalucía hay alrededor de 2.000 centros educativos públicos que ofrecen servicio de comedor a 210.500 menores . Solamente 490 de estos comedores escolares están gestionados directamente por la Junta de Andalucía, los 1.500 restantes han sido externalizados, es decir, están en manos de empresas privadas». Así, «el concurso recientemente publicado propone la renovación de contratos de la práctica totalidad de centros educativos de gestión externalizada, tiene un presupuesto de más de 140 millones de euros y se divide en 36 lotes provinciales», sistema que «veta a pequeñas y medianas empresas locales y favorece a grandes multinacionales». Además, critican que el sistema de transparencia y comunicación : «La mayoría de Asociaciones de Madres y Padres tienen verdaderas dificultades para poder mantener un mínimo diálogo con las empresas de catering, a pesar de que en los contratos está recogida la obligatoriedad de las empresas de mantener reuniones mensuales con dirección y AMPA». Desde la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional se defiende la licitación a tenor de los «cambios importantes aplicados» con objeto de «atender a las demandas de mejoras en el servicio por parte de la comunidad educativa y de adecuar la contratación a la realidad del sector y a la evolución de los precios, evitando los problemas de falta de concurrencia e incluso de abandonos del servicio sufridos en años anteriores». Asimismo, explican que el «el peso de los criterios económicos en la adjudicación ha pasado de 30 a 25 puntos, para desanimar las bajas económicas en favor de otros criterios relacionados con la prestación del servicio». El peso de la ratio de cuidadores , para acompañar a los alumnos con necesidades educativas especiales su en cambio, de 20 a 25 puntos. Finalmente, recalcan que «también se ha elevado, de 10 a 15 puntos, el peso de la mejora relativa a la introducción de productos ecológicos, para que los comedores escolares sigan siendo una palanca importante para el incentivo de consumo de este tipo de productos en Andalucía. En 2023, gracias a este criterio en los comedores escolares andaluces se han consumido cerca de 4,1 millones de kilos de productos ecológicos».