La Fórmula Uno pidió que la ciudad se implicara.
Stefano Domenicali, CEO de Liberty Media, que pactó la renovación de la F-1 con el circuito de Montmeló hasta 2026 incluido, dijo hace tiempo: “Barcelona había vivido muchos años a espaldas de la Fórmula Uno”. La ciudad condal se volcó en el Road Show del Passeig de Gràcia, con miles de personas mostrando entusiasmo y acercando el ‘gran circo’ a los ciudadanos, que dieron un espaldarazo muy potente a las aspiraciones de Barcelona de seguir con la F-1 a partir de 2026. Liberty Media nunca ha visto con buenos ojos que hayan dos grandes pruebas en dos ciudades de un solo país. Pero desde la exhibición de Barcelona con los monoplazas en la calle ya no lo descarta. Se han ido cumpliendo las exigencias de Fórmula Uno, punto por punto. Desde la adecuación del circuito a los palcos VIP hasta la proximidad del acontecimiento a los ciudadanos. Barcelona se ha puesto las pilas y siempre ha demostrado su capacidad de organizar un Gran Premio extraordinario. Se le pidió complicidad. Y ya la tiene. Los barceloneses han dejado claro su apoyo unánime a la F-1.
Seguir leyendo...