Para muchos estudiantes, la pasión por el aprendizaje no termina con la obtención de un título universitario. La idea de complementar la formación o la necesidad de especializarse para encontrar mejores salidas laborales cobra fuerza en una época de cambios constantes que exige una formación continua y a lo largo de toda la vida. En este contexto, los estudios de máster se presentan como una estupenda opción para la recapacitación y el crecimiento profesional, pero también son un objetivo difícil de alcanzar cuando la realidad económica no acompaña. Afortunadamente, existen numerosas ayudas y recursos que pueden contribuir a que el dinero no sea un obstáculo para aquellos que desean potenciar su futuro. Estas becas, ofrecidas por universidades, organizaciones gubernamentales, empresas privadas y fundaciones sin ánimo de lucro, están diseñadas específicamente para ayudar a los estudiantes a financiar sus estudios de posgrado. Ayudas públicas El Ministerio de Educación y Formación Profesional de España ofrece un programa de ayudas dirigidas a estudiantes que desean cursar estudios de máster en universidades públicas y cubren tanto la matrícula como una ayuda económica para gastos adicionales. Son becas gestionadas a través de las comunidades autónomas, universidades y organismos públicos, y adaptadas a las necesidades de los estudiantes de la región o a programas específicos. Noticia Relacionada ESPECIAL EMpreSAS/ 120 ANIVERSARIO estandar No La formación renueva su manual para pasar la reválida de una realidad mutante Alberto Velázquez Acercar las aulas a la realidad del empleo y dotar al alumno de habilidades como la adaptabilidad y el pensamiento crítico, claves en la era del aprendizaje continuo Tras la buena acogida en años anteriores, el Ministerio de Educación y Formación Profesional también ofrece ayudas de colaboración destinadas a realizar tareas de investigación en departamentos universitarios. Este año concretamente, ha ofrecido 2.431 plazas con una dotación de 2.000 euros. Podrán solicitar estas becas los estudiantes universitarios que en el curso 2024-2025 estén matriculados en el último curso de estudios de Grado o en el primer curso de un Máster universitario oficial y que, entre otros requisitos académicos, hayan obtenido como nota media en sus estudios que será de 7,25 puntos en la rama de Ingeniería, Arquitectura o Enseñanzas Técnicas y de 7,70 puntos para las ramas de Ciencia o Ciencias Experimentales, Ciencias Sociales y Jurídicas. La nota media requerida para los estudios universitarios rama de Ciencias de la Salud es de 7,8 y de 8 puntos para las de Artes y Humanidades. El plazo para la presentación de solicitudes empezó el pasado 11 de junio y finalizará el 17 de septiembre de 2024, según refleja el BOE. También existen convenios de universidades e instituciones con empresas privadas, como es el caso de las Becas Santander Ayuda Económica que ofrece una ayuda de 1000 € para gastos de manutención, residencia, material... Asimismo, la Fundación Repsol ofrece becas para estudiantes de máster en áreas relacionadas con la energía y la sostenibilidad, en colaboración con diversas universidades. Cada universidad e institución tiene información y requisitos específicos por lo que es conveniente revisar cada caso. Reconocimiento a la excelencia Otros programas de fundaciones privada están centrados en reconocer el esfuerzo de los alumnos más brillantes y en posibilitar que ese talento crezca facilitando su acceso a los programas formativos más prestigiosos. Un ejemplo son las Becas de Excelencia de la Fundación Rafael del Pino. En palabras de su director Vicente Montes, «estas ayudas quieren apoyar no solo el talento académico sino también la capacidad personal de devolver a la sociedad parte de lo que ha recibido de ella con su capacidad transformadora. De eso se trata la excelencia y cómo la valoramos desde la Fundación. Este año hemos conseguido proporcionar 16 becas frente a las 10 que solemos ofrecer precisamente por la propia responsabilidad económica de los solicitantes que han demandado la cantidad que realmente necesitaban». La dotación es desde 21.000 euros para máster de grado hasta 100.000 para máster en MBA. Coro Celigüeta Azurmendi se siente afortunada por haber recibido una de estas becas. Actualmente trabaja en la sede Microsoft de Nueva York como Program Manager (gestora de programas) en programas de inteligencia artificial y transporte sostenible. «Estudie un doble grado y máster en Ingeniería Mecánica y de Tecnologías Industriales en la Universidad de Navarra en mi cuidad natal, San Sebastián. Después del máster de mi especialización, me incorporé al mundo laboral en Madrid. Estuve trabajando para Amazon, pero tras cinco años y medio sentía que había habilidades y conocimiento en un MBA que me permitirían seguir creciendo profesionalmente. Fue entonces cuando postulé para una beca de la Fundación Rafael del Pino y gracias a ella cursé el Master in Business Administration (MBA) en el Massachusetts Institute of Technology, especializándome en Innovación, Emprendimiento y Sostenibilidad. Elegí el MIT porque teniendo ese enfoque de ingeniería, de empresa tecnológica, creo que cuadraba muy bien con mi perfil además de que la propia institución, como universidad, tiene unos valores muy humanos. ¡Y encima es referencia mundial en tecnología! Ahora, puedo devolver parte de esa ayuda, no económica pero sí humana, que yo recibí gracias a la beca». Con vocación global Las becas internacionales son sin duda, las más demandadas por los estudiantes para realizar estudios de posgrado en el extranjero, beneficiándose no sólo de una formación académica de alta calidad sino también abriéndose a nuevas experiencias culturales y profesionales. En estos casos será necesario que los solicitantes acrediten documentalmente un conocimiento escrito y hablado del idioma inglés o en su caso, del idioma en el que se llevarán a cabo los estudios a realizar. La Fundación Ramón Areces por ejemplo, abre convocatoria a principios de año para la realización de estudios de posgrado en universidades y centros de investigación de prestigio en el extranjero en Ciencias Sociales y Humanidades durante un curso académico, susceptible de prórroga por un curso más. La dotación económica es de 2.100 euros mensuales netos. Coro Celigüeta Azurmendi trabaja en el equipo de Supply Chain de Microsoft Cloud en Nueva York tras haber estudiado un MBA en el MIT con una beca de la Fundación Rafael del Pino La Fundación la Caixa también concede anualmente 100 becas para cursar estudios de posgrado con una duración máxima de 24 meses en cualquier país dentro del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), América del Norte (Estados Unidos y Canadá) y la región Asia-Pacífico (Australia, Corea del Sur, India, Japón, Singapur y China). La dotación asciende a 90.000 euros anuales. Este es el caso de Joel Bellviure, natural de Palma de Mallorca, que acaba de terminar su segundo año del Master in Classical Archaeology en la Universidad de Oxford gracias a una beca en el extranjero. «Acabo de presentar mi tesis 'The Emergence of a Provincial Market: Trade during the Early Roman Conquest of Iberia (218–100 BC)' (La Creación de un Mercado Provincial: Comercio durante la Conquista Temprana de Iberia (218–100 a.C.) gracias a 'la Caixa' que me concedió, no solo el primer año de beca, sino también una prórroga para este segundo». Terminado el doble grado de Historia y Arqueología en la Universidad de Barcelona, Joel nos explica que lo más complicado es «plantearte dónde y decidir cuando todavía no tienes notas finales ni especialidad. Además, parte del proceso de selección coincide con la entrega de TFG y es quizá cuando estamos más ocupados. Pero es cierto que desde la fundación nos ayudan y nos lo ponen bastante fácil». El miedo que puede existir desde España a que el resto de compañeros internacionales te dejen de lado o no tener un nivel de inglés casi nativo son sensaciones que hay que descartar. «Los profesores te lo ponen muy fácil y empatizan contigo si no sabes una palabra técnica determinada, son ellos mismos lo que se ponen en tu lugar y reconocen que no sabrían hacerlo mejor que tú. En cuanto a los compañeros, Oxford está estructurado en una serie de colegios ('colleges'), cada uno con su propia comunidad que te acogen y brindan un entorno más pequeño y acogedor dentro de la universidad, lo que facilita esa integración» apunta Joel. Joel Bellviure Pérez, que acaba determinar su segundo año del Master in Classical Archaeology en la Universidad de Oxford gracias a una beca de la Fundación la Caixa Uno de los aspectos que más resaltan y en los que están de acuerdo Coro y Joel es en la apertura de miras que te ofrece salir al extranjero y codearte con otras culturas y formas de entender la vida. «Todo esto te enriquece de manera personal y profesional, te permite ser flexible y adaptable, y te dota de habilidades que son altamente valoradas en el mundo globalizado actual». Mirada online Las opciones para ampliar horizontes son numerosas. Otro ejemplo son las becas Elizabeth Blackwell, con asistencia económica, y otras subvenciones, otorgadas por Blackwell Global University, que son ayudas a programas de posgrado online especializados en áreas clave del mundo empresarial y profesional. Su metodología online garantiza una formación de calidad y accesible para todos sus estudiantes a nivel mundial. Su dotación es de 5.000 a 8.000 euros. El programa internacional de Becas de Máster de Iberdrola, por ejemplo, ha ofrecido este curso 26 becas en total en distintas áreas de especialización: 7 para España, 10 para Reino Unido y 9 para México. La dotación es de 10.800 euros anuales para cubrir gastos de transporte y alojamiento en España, 18.960 euros para Reino Unido y 24.000 si se cursa en México. En Reino Unido también la Sociedad Británica Española (British Spanish Society) ofrece ayudas para cursar estudios de posgrado o desarrollar investigaciones cuyo tema de investigación se centre en las relaciones entre Reino Unido y España. Las ayudas tienen una cuantía de 9.000 libras al año (unos 10.600 euros) para cubrir los gastos de alojamiento, traslado, materiales de investigación y tasas académicas. Y por último, pero no menos importante, también existen programas específicos dirigidas a colectivos con necesidades especiales, como estudiantes con discapacidad, víctimas de violencia de género o provenientes de entornos socioeconómicos desfavorecidos.