PESTAÑA portugal-chequia-fasedegrupos-eurocopa2024 Crónica 4 Francisco Conçeicao, un actor secundario de Portugal, entró en el descuento para sellar la remontada ante la República Checa y convertirse en el gran protagonista en la noche de los récords en Leipzig, centro clave de la música clásica en la que falleció el compositor Johann Sebastian Bach y ciudad que cuenta con una de las universidades más antiguas de Alemania. Estaban cantadas las plusmarcas, pero Cristiano y Pepe, que entre ambos suman 80 años, son incombustibles. El ariete se convirtió en el primer jugador que actúa en seis fases finales de la Eurocopa y el central en el jugador más viejo en la historia del torneo. Portugal 2-1 República Checa Eurocopa 2024 | Fase de grupos | Grupo F Portugal Diogo Costa, Cancelo (Semedo, min. 90), Dalot (Inácio, min. 63), Rubén Dias, Pepe, Nuno Mendes (Neto, min. 90), Bernardo Silva, Vitinha (Conceiçao, min. 90), Bruno Fernandes, Cristiano Ronaldo y Rafa Leao (Diogo Jota, min. 63). República Checa Stanek, Coufal, Hranac, Krejci, Holes (Chory, min. 90+3), Doudera, Soucek, Provod (Barak, min. 79), Sulc (Sevcik, min. 79), Kuchta (Lingr, min. 60) y Schick (Chityl, min. 60). Goles 0-1: min. 62, Provod. 1-1: min. 69, Hranac p.p. 2-1: min. 92, Conceiçao. Árbitro Marco Guida (Italia). Amarilla a Schick, Rafael Leo, Conceiçao. Incidencias Partido correspondiente a la primera jornada del grupo F, disputado en el Leipzig Stadium. Venció 'in extremis' pero no convenció Portugal, la última de las favoritas en entrar en liza. Habían ganado Alemania, Francia, Italia y España, y se esperaba mucho más de un combinado con pleno de victorias en la clasificación. Pero este triunfo deja algunas dudas y pone en cuestión el manejo incluso en esta cita de Roberto Martínez , que cambió muy al final aunque los resultadistas dirán que la apuesta le salió bien. Los lusos disfrutan de una selección magnífica, con cuatro generaciones representadas, y Roberto Martínez tiene mucho y bueno donde elegir, hasta el punto de que la suplencia de Joao Félix no se debate . El catalán mantiene su confianza en los dos veteranos porque son «fuente de inspiración» y «representan todo lo que un profesional puede soñar». Como dijo Rúben Dias en la previa, todos siguen a sus líderes pero es indudable que, sobre todo Cristiano, condiciona la forma de jugar. Incluso Karel Poborsky, leyenda de los checos, calentó el partido afirmando en las vísperas que para sus compatriotas era preferible que jugase el astro de Madeira. Cristiano condiciona Sus números son indiscutibles, con diez goles en una fase de clasificación inmaculadas, y su figura no merece que se genere controversia, pero CR7 no disfruta de la velocidad, ni el desequilibrio, ni siquiera la potencia de antaño . Ha tenido que perder peso para seguir a un alto nivel y eso se nota. Eso sí, el instinto de depredador jamás lo perderá. Intervino poco pero tuvo dos en el primer acto, unidireccional pero sin gran sufrimiento para los checos. Primero cabeceó en semifallo un centro de Rafael Leao y luego el portero Stanek le abortó un mano a mano. De haber sido gol, revisión en el VAR porque Cristiano estaba al borde del fuera de juego. Vitinha , un centrocampista del PSG quizá infravalorado pero omnipresente, fue el mejor de los lusos en ese primer período en el que no pudieron meter mano a los centroeuropeos. También destacaron Rafael Leao , una amenaza siempre para Coufal, lateral del West Ham, y se vio algo más de Bruno Fernandes que Bernando Silva en el medio. Atrás, sin dificultad alguna en los portugueses, notables en las vigilancias y en la defensa de los balones aéreos. Circulaban bien el balón los lusos, pacientes para ir madurando el choque, pero no hallaban huecos ante un rival siderúrgico. Vistos de lejos, los checos parecen un ejército. Altos, fuertes, disciplinados, atentos, concentrados y hasta el pelo corto. En la familia que ordena Ivan Hasek, sobresalen el centrocampista Soucek, la brújula del equipo, y Patrick Schick, delantero que ha completado un curso fantástico en el Leverkusen campeón de Xabi Alonso y que mantiene una curiosa rivalidad con Cristiano. Ambos fueron los máximos goleadores de la última Eurocopa con cinco tantos, aunque fue el portugués quien le ganó la partida al disputar un partido menos que su rival. Portugal, sin embargo, se fue en octavos de final y los checos llegaron hasta cuartos. De nuevo bajo una intensa lluvia, Portugal aceleró tras el descanso y arrinconó aún más a su abnegado adversario. Stanek no tenía que intervenir, pero la sensación era de peligro. Cristiano las pedía todas. Si de cabeza no acertaba, probaba suerte con una falta directa lejanísima. A continuación, gestos para jalear al público. Diez córners habían lanzado ya los lusos, quedaba media hora y aún Bob Martínez no movía el banquillo. Sorprendente. No se habían ni acercado, pero los checos aprovecharon una distracción para adelantarse . Enorme y lejano disparo de Provod , centrocampista del Slavia de Praga. Ya por detrás, Bob cambió un central por otro y retiró a Leao por Diogo Jota. Cuestión de galones. Acusó el golpe tan inesperado Portugal y comenzó a perderse en protestas. Menos mal para ellos que igualaron con un golpe de fortuna. Despeje innecesario del portero, que debió blocar en lugar de despejar el remate de Nuno Mendes, rebote y autogol de Hranac . Hasta el final, acoso y derribo de las 'Quinas'. Gol anulado a Diogo Jota por fuera de juego previo de Cristiano en su remate al palo y gloria para Conceiçao . Los checos murieron en la orilla.