TEL AVIV, junio 17.— El Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, planea tomar decisiones futuras sobre la guerra en Gaza con un pequeño grupo de consulta, al disolver el gabinete de guerra después de que dos de sus seis miembros renunciaran en desacuerdo con la marcha de las operaciones militares contra la Franja de Gaza.
Netanyahu formará un pequeño órgano de consulta con los cuatro miembros restantes para tomar decisiones sobre la guerra en Gaza.
Este lunes, Netanyahu disolvió el gabinete de guerra después de que Benny Gantz y Gadi Eisenkot (ex jefe del Estado Mayor israelí y observador en el gabinete de guerra), renunciaran al organismo.
El gabinete de guerra se creó como una coalición de unidad en respuesta a la sorpresiva operación de Hamás el 7 de octubre pasado, para asesorar al Primer Ministro sobre las decisiones en Gaza.
Sin embargo, Gantz y Netanyahu no estuvieron de acuerdo sobre la posibilidad de negociar con Hamás para liberar a rehenes israelíes retenidos en Gaza.
Después de que Netanyahu efectivamente anulara un acuerdo de alto el fuego que supondría la liberación de los israelíes, Gantz y Eisenkot abandonaron el gabinete de guerra el 9 de junio y en una conferencia de prensa celebrada en Tel Aviv, Gantz instó a Netanyahu a convocar elecciones anticipadas «lo antes posible». «No permitamos que nuestra nación se desmorone», imploró Gantz.
«Desafortunadamente, Netanyahu nos impide lograr una verdadera victoria», continuó el dimitente, quien aseguró: «Para garantizar una victoria real, deberíamos celebrar elecciones este otoño, un año después del desastre, para establecer un Gobierno que se gane la confianza de la gente y enfrente eficazmente nuestros desafíos».
Gantz también pidió al ministro de Defensa, Yoav Gallant, que dimitiera del Gobierno de Netanyahu.
Gantz, que se unió al Gobierno el 7 de octubre, había fijado el 8 de junio como fecha límite para que Netanyahu redactara un plan de posguerra para Gaza o abandonaría la coalición, dijo Palestine Chronicle.
Otros ministros israelíes inicialmente intentaron ocupar esos puestos. Para evitar esto, Netanyahu disolvió el organismo y designó un pequeño foro con los miembros restantes del gabinete de guerra para tomar decisiones sobre Gaza, dijo un comentario en antiwar.com.
El nuevo grupo incluye al propio Netanyahu, al ministro de Defensa, Yoav Gallant; al ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer; al jefe del Shas, Aryeh Deri, y al jefe del Asesor de Seguridad Nacional, Tzachi Hanegbi. Se informa que Dermer y Deri son confidentes de Netanyahu.
Una fuente que habló con Haaretz dijo que Netanyahu quería consolidar el poder e impedir que los ministros de extrema derecha ocuparan los escaños.
«En la práctica, no hay ningún cambio sustancial en el proceso de toma de decisiones, pero el anuncio de Netanyahu de disolver el gabinete de guerra permite a [el Ministro de Seguridad Nacional] Itamar Ben-Gvir dar un paso atrás y no insistir en ser parte del limitado foro de toma de decisiones», dijo la fuente.
Si bien Netanyahu puede querer excluir a Ben-Gvir de la toma de decisiones, los dos están de acuerdo en muchas cuestiones sobre la guerra. Después de que el ejército israelí anunciara que suspendería los combates a lo largo de una carretera en Gaza para permitir que los camiones de ayuda ingresaran a la Franja, tanto Netanyahu como Ben-Gvir reprendieron a las fuerzas militares por esa medida.
Palestine Chronicle dijo que la decisión de disolver el gabinete se produce en medio de divisiones entre Netanyahu y altos comandantes militares israelíes.
También este lunes, el canal oficial israelí KAN reveló que un documento elaborado en septiembre de 2023 por la División de Gaza del ejército israelí ya había advertido, previo al 7 de octubre, que el grupo palestino Hamás se preparaba para lanzar un ataque contra Israel con el objetivo de capturar entre 200 y 250 oficiales y colonos israelíes.
La noticia del documento, que también fue reportada por Al-Jazeera, detallaba el proceso de toma de rehenes planeado por Hamás, citando a una fuente de seguridad israelí diciendo que el documento también era conocido por la inteligencia israelí, al menos dentro del Comando de la División de Gaza.
Israel dice que 1 200 soldados y civiles murieron durante la Operación Inundación de Al-Aqsa el 7 de octubre. Los medios israelíes publicaron informes que sugerían que muchos israelíes murieron ese día por «fuego amigo», es decir de las propias fuerzas de Israel.