Pedro Sánchez participó en la Cumbre sobre la Paz en Ucrania que se celebró en Locarno, Suiza, el sábado 15 y el domingo 16 de junio. Ni Rusia ni China mandaron delegaciones al encuentro, en el que sí participaron unos 90 países, muchos representados por sus presidentes o primeros ministros.
Presidencia del Gobierno difundió en su web y en sus perfiles en redes sociales varias fotos del encuentro. Entre ellas, incluyó imágenes de la foto de familia que se hicieron los mandatarios reunidos.
La Moncloa optó por publicar varias imágenes en las que a Sánchez se le ve en el centro y en primera fila de esa foto de familia. Eso llevó a algunos simpatizantes socialistas a presumir en redes sociales de que la imagen mostraba a las claras la relevancia internacional del presidente español.
Pero lo cierto es que Pedro Sánchez realmente no estaba situado en el centro de la foto de los asistentes a la cumbre de Suiza. De hecho, en el recorte que eligió La Moncloa se ve en un extremo al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, y a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, lo que ya hace sospechar que no era esa la composición real del “posado”.
Efectivamente, la foto completa permite comprobar que quien estaba en el centro, y no en un extremo, era Zelenski, junto a la presidenta de la Confederación Suiza, Viola Amherd. Detrás, también en el centro, se puede ver a Von der Leyen y a la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.
Seis posiciones a la derecha de Zelenski (visto desde el lugar de los fotógrafos) estaba Pedro Sánchez, y después el canciller alemán, Olaf Schölz. Más cerca del centro que Sánchez se encontraban, entre otros, los primeros ministros de Países Bajos, Mark Rutte; Canadá, Justin Trudeau; y Reino Unido, Rishi Sunak; así como el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron.
No es la primera vez que la posición de Pedro Sánchez en las fotos de grandes cumbres internacionales es objeto de polémica: unos las usan para ensalzar su “importante” papel internacional, otros critican su “marginación” entre mandatarios extranjeros.
