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Acabada la temporada de esquí y una vez se aseguran las estaciones que ya no queda nieve en las pistas, llega el momento de la limpieza de las instalaciones. Porque si algo bueno tienen las estaciones, es que sus montañas se limpian cada año. Se recogen kilos y kilos de basuras, y aunque podamos pensar que la gente sigue siendo muy incívica, la realidad es que la concienciación por el respeto del entorno ha crecido mucho hoy en día. Pocos son a los que se les ocurre tirar un envoltorio directamente al suelo, aunque siguen los inconscientes que si lanzan sus colillas. Por suerte cada vez menos.
La realidad es que estaciones de esquí como la de Grandvalira Resorts, Sierra Nevada o N'PY, que cada año suelen organizar una jornada con voluntarios, recogen cada vez menos basura. Sin ir más lejo...'
