La pasada semana, la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional anunciaba cómo iba a desarrollarse el próximo curso académico de FP, el primero «totalmente Dual». La noticia se trasladaba en positivo al incluir casi 168.000 plazas de nuevo ingreso y 71 ciclos formativos novedosos que aupaban el total a 3.747. Sin embargo, pocos días después varios colectivos relacionados con el ámbito educativo han puesto sobre la mesa la reducción de plazas en la oferta de FP a distancia . «De 400 a entre 60 y 130 por grado», lo que «implica recortes en el personal docente». Esa era la crítica que la Confederación Andaluza de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado por la Educación Pública ( Codapa ) lanzaba a primera hora de este lunes en su perfil de X, antes Twitter. Su portavoz, Rocío Bejínez , aseguraba que la noticia les había llegado «de forma sorpresiva» y que venía a certificar que «la FP andaluza está siendo la herramienta perfecta para que este Gobierno del Partido Popular en la Junta continúe con sus políticas privatizadoras de la Educación». Máxime cuando, aseguran, este modelo de FP está en auge y la situación se solapa a «una falta de plazas en la FP pública que venimos denunciando desde hace años» que obliga a que los jóvenes solo puedan estudiar el ciclo que quieren si «sus familias pueden hacer frente a los gastos de la privada». En esa línea se ha manifestado el sindicato Ustea Andalucía , que vaticina que «estas supresiones van a suponer la pérdida de puestos de trabajo docentes y graves perjuicios para el alumnado» y que muestran una «absoluta falta de transparencia» del Ejecutivo regional. El discurso también ha alcanzado cota política. La portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Por Andalucía, Esperanza Gómez, ha aseverado que la Junta «desprecia profundamente la educación pública» toda vez que «las plazas de Formación Profesional a distancia se van a reducir a menos de la mitad para el próximo curso». «Agrupar, que no eliminar» Sin embargo, la versión oficial choca de pleno con estas críticas del personal docente y las organizaciones sindicales y políticas. Desde la Consejería explican que «no se reducen las plazas ni se reducen opciones» . El movimiento ha pasado únicamente por agrupar «determinadas ofertas de distancia que están autorizadas en más de un centro docente en un único centro», pero «manteniendo los títulos actualmente ofertados» . Desde la Consejería de la que Patricia del Poz o es titular avanzan que «en los centros en los que se agrupe la oferta se aumentarán los puestos escolares para mantener la oferta actual y se pondrán los recursos necesarios. Por tanto no hay reducción de plazas». Se justifican con la propia definición de este modelo de enseñanza, que al ser a distancia no implica vinculación territorial de cercanía entre la institución y el estudiante. «Al alumnado que se matricula no le afecta donde está situado físicamente el centro, puesto que no es enseñanza presencial , las opciones del alumnado no se reducen», insisten. Finalmente, recuerdan que «estamos en un momento de transformación. Entran en el currículo nuevos módulos formativos y se debe reorganizar la FP Andaluza». Es en este contexto en el que «se enmarca el reagrupamiento de las ofertas de distancia», concluyen.
