Apenas un día después de su renuncia como máxima representante de Sumar , la vicepresidenta segunda del Gobierno Yolanda Díaz resta importancia a su dimisión y advierte: «No me voy, me quedo» a la par que asegura que su salida de la formación es «para ganar las próximas elecciones generales», dejando en el aire la posibilidad de presentarse como candidata de la plataforma que hasta ahora dirigía. Estas han sido las palabras de la vicepresidenta segunda del Gobierno desde Suiza, a la salida de una reunión con el director general de la Organización Internacional de los Trabajadores (OIT) este martes por la tarde. Díaz niega que su rol en el Ejecutivo vaya a cambiar: « Al revés . Dando este paso lo que hago, de manera decidida, es preservar el Gobierno de coalición progresista frente a quienes quieren deslegitimar a un Gobierno que sale de las urnas y que ha ganado las elecciones«, declara, destacando tanto su labor como presidenta del grupo parlamentario, encargada de coordinar las cinco carteras ministeriales que dependen de Sumar -Trabajo, Cultura, Sanidad, Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 e Infancia y Juventud-. La ministra lanza un mensaje de «tranquilidad» a los simpatizantes de la plataforma, reafirmando que continúa siendo parte del órgano de dirección que se va a reunir este jueves para dar arranque a un «debate tranquilo». «Yolanda Díaz no se va» , avisa, Yolanda Díaz «lo que ha hecho es política de la buena» porque «cuando hay malos resultados, hay que asumir responsabilidades». Fuentes de Sumar no especifican si habrá un nuevo coordinador general del proyecto o si apostarán por un modelo bicéfalo con una cabeza institucional y otra orgánica al más puro estilo del PNV o de Ciudadanos en su última etapa. El portavoz del partido en el Congreso, Íñigo Errejón, ya había explicado este martes en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, que Yolanda Díaz continuaba siendo el «mayor activo político y electoral» del espacio y que sólo ha dado un paso a un lado con el objetivo de dar prioridad a su faceta institucional. La realidad es que Díaz abandona sus funciones orgánicas al frente del partido en un momento sin frentes abiertos y sin procesos electorales a la vista que requieran de toma de decisiones de gran calado por parte de una líder nacional, y que continúa siendo la figura interlocutora, como presidenta del Grupo Parlamentario Sumar que es, a la que deben dirigirse el resto de movimientos y organizaciones políticas –entre las que reina la necesidad de«reflexión» para definir un nuevo rumbo del proyecto desde la «horizontalidad» y la «honestidad»– que forman parte del proyecto para relacionarse con el Ejecutivo central. Noticia Relacionada estandar No Yolanda Díaz dimite como líder de Sumar tras el varapalo en las europeas Patricia Romero Errejón ha reconocido que el abandono de los cargos orgánicos Díaz en Sumar es el «reconocimiento de unos malos resultados» en los comicios comunitarios, pero sobre todo la elección de concentrarse en «empujar» al Gobierno de coalición para que «salga de la parálisis» y la legislatura de Sánchez «eche a andar». «Menos cartas y más BOE» , ha ironizado el diputado en referencia a la última carta del presidente del Gobierno tras la citación judicial de su mujer. El «mayor activo» de Sumar «No estamos centrados en elegir un nuevo nombre porque no hay que sustituir políticamente a Yolanda Díaz» Íñigo Errejón Portavoz de Sumar en el Congreso «Los resultados no fueron buenos. Hay que estudiar y corregir el rumbo, y no se corrige en una semana», ha indicado Errejón, que no se postula como sucesor de Díaz al estar centrado en la portavocía del grupo plurinacional en la Cámara Baja. Fuentes de la formación señalan también que el momento es «duro» y el proceso que se abre va a ser «largo» , «pausado» y de «reflexión política», enfriando las expectativas de que salga un nuevo nombre de la reunión del Grupo Coordinador de mañana. Por el momento, afirman, el proyecto «va a seguir funcionando» en una etapa interina, haciendo hincapié en que Díaz no ha perdido autoridad, ya que sigue como presidenta del grupo parlamentario. «No estamos centrados en elegir un nombre porque no hay que sustituirla políticamente», zanjan el tema. Los de Belarra no se replantean nada Mientras tanto, en Podemos, la dimisión de Yolanda Díaz al frente de Sumar no les hace replantearse nada . La formación morada descarta la reunificación y no tenderá puentes, al menos a corto plazo, con el proyecto que hasta ahora lideraba la vicepresidenta segunda del Gobierno. El motivo, decidieron «pasar página para poder hacer política en el Congreso» en diciembre al abandonar el Grupo Parlamentario Sumar para pasarse al Mixto. Y «hoy no va a ser distinto» , dejó claro ayer en declaraciones a los medios el portavoz adjunto de los morados, Javier Sánchez Serna. Lo que sí dejan es la puerta abierta en un futuro, de cara a unas hipotéticas elecciones. Según fuentes del partido, la actualidad política es la que marca las posibilidades de trabajar en una dirección u otra, y nadie sabe qué va a ocurrir en un futuro. Y dado que ahora mismo no hay posibles elecciones a la vista, están enfocados en seguir construyendo su propia propuesta y que la legislatura eche a andar. «Sumar, sin Yolanda Díaz, tiene poco sentido» , confiesan las mismas fuentes, pero tendrán que ser sus partidos quienes se den cuenta de lo que está pasando y quienes decidan. Aun así, desde la formación que dirige Ione Belarra insistieron ayer en mostrarse «muy respetuosos» con las decisiones que tome el proyecto de aúna hasta 14 partidos a la izquierda del PSOE. Desde la formación morada se reiteraron en la idea de haber dado «un paso muy importante» el domingo, con los resultados de los comicios comunitarios que otorgaron dos escaños a Podemos, tan sólo uno menos que Sumar: «Hemos vuelto a poner en pie a una izquierda transformadora –presumen–. Salimos de las europeas con más ganas para construir este proyecto político». En la misma línea se expresaron el lunes, horas antes de conocer la noticia de que Díaz abandonaba su cargo orgánico en Sumar, Ione Belarra e Irene Montero, haciendo evidente que habían vuelto y que van a por Sumar. «Nos hemos puesto de pie, pero no nos conformamos», advirtieron no sin antes mandar un recado: «Tenemos fuerza de sobra y somos por encima de cualquier otra cosa un equipo». Ninguna de las dos exministras se ha pronunciado aún sobre la salida de Díaz de Sumar. Llamó la atención ayer que al inicio de la reunión de la Mesa del Congreso no se detuviera a hacer declaraciones a los medios como sí acostumbra hacer todos religiosamente todos los martes por la mañana en los pasillos de la Cámara Baja.