El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo (Vox), ha advertido a la alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala (PP), que su puesto depende de Vox después que ésta haya rechazado las medidas del partido de extrema derecha contra los inmigrantes. “No olvides que eres alcaldesa gracias a Vox y que nuestros votos no son gratis. Hay que actuar contra la inmigración ilegal”, ha reclamado García-Gallardo a través de la red social X.
Esta ha sido la reacción del vicepresidente autonómico, cuyo partido había anunciado que la Policía Local iba a “inspeccionar” sin control judicial pisos de migrantes para evitar fraudes del padrón. Cristina Ayala le ha replicado, a través de los medios de comunicación: “Si García-Gallardo tiene algo que decir, que lo diga”.
La regidora burgalesa ha asegurado que la coalición PP-Vox no está “en riesgo” a pesar de las diferencias de criterio mostradas respecto a estas inspecciones, que invadirían competencias de la Policía Nacional. Ayala ha insistido en que lo único que ha habido es un “desacuerdo puntual”, recoge EFE. Ha ejemplificado esta unión con que este mismo viernes se celebrará la fiesta del Curpillos y todo el equipo de Gobierno irá a tomar unos “pinchos”.
El equipo de gobierno local de Burgos mantendrá el martes una reunión de coordinación en la que tratarán la propuesta de Vox sobre inmigración porque, según Ayala, hay partes con las que no está de acuerdo el PP.
Los planes que Vox anunció a los medios de comunicación fueron “inspecciones periódicas, visitas domiciliarias y controles de identidad” para detectar “posibles casos de empadronamiento ilegal”. El vicealcalde burgalés, de Vox, también afirmó que la Policía Local recurriría a la información que tienen los Servicios Sociales locales y autonómicos “para compartir información relevante y coordinar esfuerzos en la detección y prevención de empadronamientos ilegales”.
El Gobierno de España denunció entonces que este plan era xenófobo y violaba las competencias de Policía Nacional. La alcaldesa de Burgos desautoriza las órdenes de Vox para “inspeccionar” los pisos de migrantes sin control judicial. La alcaldesa de Burgos tardó un día en reaccionar a estos anuncios y lo que hizo fue desautorizar a Vox. “Solo la alcaldesa puede dar instrucciones a la Policía Local”, apuntó este jueves.
Vox ya rompió con el Partido Popular burgalés en 2019, cuando el tripartito PP-Ciudadanos-Vox se rompió y el socialista Daniel de la Rosa terminó en la Alcaldía para luego decidir un gobierno de coalición . Burgos iba a tener un regidor de Ciudadanos después del pacto que los tres partidos habían alcanzado a nivel nacional, pero los dos concejales de Vox rompieron entonces la disciplina de partido y votaron a su propio candidato. El líder más votado fue Daniel de la Rosa, que estuvo en la Alcaldía durante cuatro años, en los que gobernó en minoría hasta finales de 2020 y en coalición con Ciudadanos desde entonces.
