Las elecciones generales del pasado 23 de julio se decidieron en Cataluña. Fue allí donde Pedro Sánchez cosechó su mejor resultado territorial a lomos de un PSC que, hace tan sólo un mes, afianzó su fortaleza con la contundente (e incierta) victoria autonómica de Salvador Illa. Son 19 los socialistas catalanes con asiento en el Congreso, por tan sólo ocho –seis del PP y dos de Vox– los diputados de derecha no nacionalista. Los otros 21, además, votaron a favor de la investidura del presidente del Gobierno. No hacen falta más argumentos para sostener cuál fue el talón de Aquile ...