Vivir en el centro de Madrid tiene una ventaja muy grande si eres creyente: tienes el cielo prácticamente ganado. Ejercitas como nadie las virtudes de la paciencia y la resignación, porque prácticamente todo lo que sucede, todas las “congregaciones de muchedumbre”, que decía el rey Fernando VI ya en 1751, ocurren en la Gran Vía. O entre la Gran Vía y Cibeles. Es lo mismo. Acaba de ganar el Real Madrid su decimoquinta Liga de Campeones o Champions League, de soltera Copa de Europa. A mí no me gusta el fútbol pero me parece muy bien, me alegro mucho por ellos. Y ya ni me molesto e ...