La ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, se ha citado este viernes con los consejeros autonómicos del ramo para abordar la problemática de los pisos turísticos. El Gobierno ha pedido colaboración a las comunidades para recopilar datos y poner en marcha antes de que acabe 2025 una plataforma en la que agrupar esta información, tal y como exige un nuevo reglamento aprobado recientemente en la Unión Europea. El objetivo es que estos datos permitan a los ayuntamientos perseguir el fraude.
La plataforma estatal que el Gobierno pretende impulsar con la ayuda de las comunidades y municipios busca «homologar» y dar «uniformidad» a los datos sobre pisos y habitaciones ofertadas en portales online para alquiler turístico o temporal de menos de un año. La ministra se ha fijado como plazo para poner en marcha esta iniciativa finales de 2025, acelerando así el plazo de dos años previsto en el reglamento europeo. Rodríguez ha asegurado que el cumplimiento de la nueva norma permitirá contar con «mejores datos» para afrontar el fenómeno de los pisos turísticos y perseguir el fraude y ha instado a las comunidades y ayuntamientos a trabajar de forma conjunta para desarrollarla.
«Es fundamental la disposición de datos públicos al servicio del interés general», ha explicado la ministra antes del inicio de la reunión, en la que han participado también la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), así como responsables del Ministerio de Turismo y sus homólogos autonómicos. «El reglamento europeo daba un plazo de dos años para poner en marcha la plataforma y quiero acelerar ese ritmo para antes de que termine 2025 tenerla lista», ha insistido.
Según los últimos datos del INE, en el último año el número de pisos turísticos ha crecido un 9,2% con respecto a febrero de 2023 hasta contabilizar un total de 351.389 apartamentos de este tipo. Estos pisos representan el 1,33% del total de viviendas existentes en España. Andalucía, la Comunidad Valenciana y Cataluña concentran la mitad de estos inmuebles.
La titular de Vivienda ha reconocido que la proliferación de pisos turísticos supone un problema al reducir la oferta de vivienda para uso residencial y, en consecuencia, provocar que los precios crezcan. Por ello, se ha comprometido a estudiar junto a las comunidades y ayuntamientos fórmulas para «primar» el uso residencial de la vivienda sobre cualquier otro, allí donde este se ve «amenazado». «Frente a cualquier otro uso, hemos de primar siempre el uso residencial de la vivienda, que sirva como hogar», ha expresado.
No obstante, la ministra ha matizado que la realidad de las distintas zonas de España es distinta y esa diversidad habrá de ser tenida en cuenta en las soluciones que se adopten. Rodríguez ha reconocido también que el turismo es un sector «importantísimo» para España y así pretende seguir siéndolo, aunque ha destacado la necesidad de buscar soluciones cuando «entra en conflicto» con el desarrollo de la vida personal de los vecinos.