Famosa por sus posados en lencería ha sido denunciada por el robo de piezas valiosas de una villa de Florencia y de fugarse para eludir problemas fiscales
El misterio que rodea al supuesto retiro de la tenista Camila Giorgi continúa. La italiana, hija del argentino Sergio Giorgi (excombatiente de Malvinas), tiene 32 años y ocupaba el puesto 116 del ranking mundial. Sin embargo, decidió colgar la raqueta sin hacer ningún anuncio para centrarse en su faceta como modelo de lencería.
Lo hizo sin avisar, abruptamente. “Asombrada, la WTA la buscó para pedirle un comentario, encontrando teléfonos desconectados (el suyo, el de su padre, los de sus hermanos Leandro y Amadeus), un mensaje vago y críptico (Camila no revelará nada sobre ella hasta Roland Garros, tal vez) y el eco de una indiscreción que la habría trasladado apresuradamente al extranjero por problemas en Italia”, publicaba el diario Corriere della Sera, añadiendo aún más misterio.
“Lo que sí es cierto - añadía el diario italiano-, en los documentos, es la reciente acusación de la Fiscalía de Vicenza por la emisión de certificados falsos de vacunación contra el coronavirus (’Las investigaciones se centran en una médica de Vicenza que, para cubrirse la espalda, mencionó los nombres de personajes famosos: yo me vacuné en varios lugares, estoy tranquila’, dijo en una última entrevista)”. El apellido de la tenista apareció en una lista de clientes de un médico que proporcionaba documentos falsos que le permitían al portador viajar a países que exigían las vacunas, sin estar inoculado contra el Covid-19.
Aún se desconoce su paradero exacto pero la deportista se ha visto involucrada en un nuevo escándalo. Según adelanta The Mail, ha sido acusada de no pagar seis meses de alquiler y de robar muebles valiosos de la villa florentina en la que vivía hasta hace tres meses.
La jugadora de 32 años, que jugó por última vez en el Abierto de Miami de marzo contra la número uno del mundo, Iga Swiatek, anunció oficialmente su retiro la semana pasada. Pero antes de su declaración pública, se informó que Giorgi había huido a los Estados Unidos desde su Italia natal en un intento de evadir las autoridades fiscales italianas.
Ahora se dice que la ex número 26 del mundo robó "la mitad de los muebles" de la villa alquilada en Calenzano, cerca de Florencia y huyó de Italia a Estados Unidos. Según La Repubblica, esto incluía una serie de artículos costosos, como alfombras y mesas antiguas.
"No sólo se fueron sin decir nada con seis meses de alquiler impago", dijo el propietario de la villa al medio italiano, "sino que hicieron desaparecer la mitad de nuestros muebles. Alfombras persas, muebles de gran valor, incluso una mesa antigua de media tonelada. Estamos hablando de unos 100.000 euros.
El propietario asegura que se ha puesto en contacto con el padre de la tenista: "Le escribí para decirle que al menos debían devolvernos nuestras cosas, él respondió de manera despectiva diciendo que eran objetos de poco valor. Un comportamiento odioso, para aquellos como yo que hemos sufrido no solo daños económicos sino también emocionales.
"Esos objetos forman parte de la vida de mi madre y de la mía: los quiero recuperar, al menos hasta este punto, teniendo en cuenta que hemos perdido la esperanza por los miles y miles de euros de alquileres atrasados".
Según los medios, los vecinos vieron furgonetas de mudanzas en la propiedad y alertaron al propietario, quien llegó a la villa y descubrió que la casa casi había sido saqueada.
"Cuando llegué no había nadie y la casa estaba medio vacía. En el jardín, sin embargo, había otros muebles y alfombras apiladas unas sobre otras. "Probablemente ya habían llenado los camiones y no sabían dónde ponerlos", añade.
La estrella debe comparecer ante un juez de instrucción en Vicenza el 16 de julio para la primera audiencia preliminar de la investigación sobre los documentos de vacunación falsos pero en Italia se temen que no asista a su cita en los tribunales.
