Las tropas de Israel continuaron este lunes sus ataques aéreos sobre Rafah, según varios residentes, horas después de que incitara a los palestinos a evacuar partes de la ciudad.
Miles de personas huyen del este de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, mientras crecen los temores de un asalto militar en toda regla contra la ciudad que alberga a más de un millón de desplazados.
Cientos de palestinos comenzaron a evacuar de zonas al este de Rafah en medio de planes israelíes de invadir la ciudad en el sur de la Franja de Gaza, informa Telesur.
As Israel rains bombs on Rafah, don’t forget the 600,000+ Palestinian children trapped there.
— sarah (@sahouraxo) May 6, 2024
Where are they supposed to go?
Nowhere in Gaza is safe. pic.twitter.com/wQ9Ina3HF4
Los civiles salieron de sus campamentos en Rafah para buscar refugio en otros lugares de la Franja de Gaza antes de una esperada ofensiva del ejército israelí.
Algunos cargaron niños y pertenencias en carros tirados por burros, otros en automóviles, otros simplemente caminaron. El techo de al menos un coche estaba repleto de colchones. Otro llevaba una silla de ruedas en el maletero.
Los testigos dijeron que los evacuados comenzaron a avanzar hacia el centro y oeste de Rafah, al oeste de Khan Younis y al norte de Deir al-Balah.
As Israel rains bombs on Rafah, don’t forget the 600,000+ Palestinian children trapped there.
— sarah (@sahouraxo) May 6, 2024
Where are they supposed to go?
Nowhere in Gaza is safe. pic.twitter.com/wQ9Ina3HF4
El ejército israelí emitió órdenes de evacuación inmediata para los palestinos en los barrios orientales de Rafah y les pidió que se trasladaran a la ciudad de al-Mawasi en el sur de Gaza.
Se estima que alrededor de 100 000 civiles palestinos viven en las zonas que serán evacuadas, según la Radio del Ejército israelí.
Hamás advirtió que los preparativos para la ofensiva terrestre de Israel en Rafah dejan de lado el destino de los rehenes cautivos en el territorio y amenazan a cientos de miles de civiles.
El movimiento islamista palestino afirmó en un comunicado que Israel se prepara para lanzar una ofensiva terrestre a gran escala «sin considerar la catástrofe humanitaria en la Franja ni el destino de los prisioneros enemigos en Gaza», en alusión a los rehenes israelíes.