Max Eberl comentó sobre las especulaciones de que el FC Bayern München está interesado en Jonathan Tah y Florian Wirtz, del Bayer Leverkusen.
Con el cierre de la temporada y cerca de la apertura del mercado veraniego, los equipos ya empiezan a tener en cuenta los jugadores que podrían conformar sus equipos en la siguiente campaña. Mientras el Leverkusen busca mantener su plantel intacto para la defensa del título en la Bundesliga, el FC Bayern sigue de cerca a dos de sus jugadores.
Se ha especulado que Tah podría abandonar el club en la próxima ventana de transferencias, mientras Wirtz podría irse en el verano de 2025. Sobre el defensor, el directivo apenas habló de dicha posibilidad, dejando todo abierto:
«La respuesta puede resultar aburrida, pero no puedo decir mucho. Estamos considerando nuestras opciones. Tenemos cuatro grandes centrales y jugaremos un partido muy importante contra el Real Madrid el miércoles. Con el nuevo entrenador, encontraremos jugadores que ojalá quieran jugar con nosotros».
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Aunque el FC Bayern ha invertido mucho en la defensa central en el pasado reciente, no está del todo descartado el refuerzo adicional. En cambio, por Wirtz, Eberl se mostró interesado en el jugador de 21 años si este estuviera tuviera ganas de mudarse al Allianz Arena, incluso si su precio supera 100 millones de euros:
«El FC Bayern demostró el pasado verano, con la contratación de una estrella absoluta como Harry Kane, que el club puede gastar esas sumas, pero no todos los años. Cuando un jugador de este calibre, como Florian Wirtz, Harry Kane u otros, está disponible y en el mercado, entonces tenemos que considerarlo. Pero también es posible que el jugador rechace el movimiento».
El director deportivo del Leverkusen, Simon Rolfes, declaró a principio de la semana que harán todo lo posible para que ambos jugadores permanezcan en la planilla de Xabi Alonso. Con Wirtz asegurado, sus esfuerzos estarán en Tah, algo que piensa que no requerirá mucho esfuerzo:
«Que a cierta edad pienses en la posibilidad de hacer otra cosa es comprensible y no es un problema. Pero tengo la buena sensación de que se quedará, porque él sabe lo que pasó aquí en los últimos años y también lo que aún es posible. Por eso estoy muy tranquilo».
