Pone en valor que los socialistas formaran parte "de aquellos gobiernos, de una etapa fructífera" para Euskadi
VITORIA, 10 (EUROPA PRESS)
Ramón Jáuregui, vicelehendakari durante uno de los mandatos de José Antonio Ardanza, ha destacado que el lehendakari José Antonio Ardanza fue "el hombre de la paz, del pacto, de la modernidad, del autonomismo y del autogobierno", un "hombre clave" en la historia de Euskadi "en momentos muy difíciles". "Me siento emocionado de haber formado parte, junto a muchos de mis compañeros aquí presentes, de aquellos gobiernos de una etapa fructífera para el país", ha afirmado.
Tras asistir a la capilla ardiente instalada en el Palacio de Ajuria Enea, en Vitoria-Gasteiz, ha señalado que José Antonio Ardanza, lehendakari de 1985 a 1999, fallecido este pasado lunes a los 82 años de edad, "fue un hombre que merece el homenaje y el recuerdo de todos los vascos".
"Los socialistas vascos nos sentimos muy orgullosos de haber formado parte de ese tiempo, de esa época de construcción de la paz, de construcción de la Euskadi autogobernada y moderna, de la construcción de una Euskadi plural que se hacía reconociéndonos mutuamente, respetándonos y construyendo mediante el diálogo, el pacto, el avance del país", ha subrayado.
Según ha manifestado, Ardanza fue "el hombre de la paz, el hombre del pacto, el hombre de la modernidad, el hombre del autonomismo y del autogobierno". "Muy probablemente la historia todavía lo colocará en un lugar más alto del que quizás tengamos hoy en nuestra perspectiva", ha añadido.
Asimismo, ha declarado que fue un "hombre clave" en la historia de Euskadi "en momentos muy difíciles". "Merece nuestro recuerdo, nuestro homenaje. Reconozco que me siento emocionado de haber formado parte, junto a muchos de mis compañeros aquí presentes, de aquellos gobiernos de una etapa fructífera para el país", ha agregado.
Preguntado por su relación personal con el lehendakari Ardanza, Jáuregui ha destacado que "fue siempre un hombre afable" en el "respeto al otro, a la necesidad de entender que existe frente a nosotros una persona con otra manera de pensar, y de que Euskadi se construía en el pacto".
"Esa fue su virtud personal. No siempre nuestra relación fue cómoda porque no puedo dejar de reconocer que, al principio, aquel gobierno que hicimos en el año 87 estaba cargado de tensión partidaria. Pero fue una tensión que se fue aminorando con el tiempo y fuimos construyendo una relación personal que además de afable, fue amistosa", ha añadido.
En este sentido, ha relatado que "hasta hace muy poco tiempo" ha mantenido la relación con el lehendakari Ardanza y ha insistido que "en su comportamiento personal, siempre hubo no solamente afabilidad, respeto y tolerancia, también amistad".
