La diferencia entre Fernando Alonso y Lance Stroll parece estar pasando factura a la escudería. Y es que la comparación entre el asturiano y el canadiense es tan sonrojante que la escudería ha tenido que tomar cartas en el asunto.
La relación entre ambos pilotos y su gestión por parte de la escudería ha estado en el punto de mira desde que el asturiano fichara por los de Silverstone. El primer año del asturiano en el equipo verde fue de los bombazos de la temporada pero en la escudería admiten que los inicios no fueron fáciles. En declaraciones en exclusiva para Motorsport, Mike Krack reveló cual fue la mentalidad de Aston Martin a la hora de tratar con los pilotos, Krack dijo: "Tenemos una situación particular, obviamente, porque uno de los pilotos es el hijo del propietario y el otro es un experimentado piloto maduro. Así que hay que pensar: ¿cuál es la dinámica y cómo va a evolucionar?".
"Cuando Fernando se unió a nosotros, mucha gente nos advertía de que podía ser difícil, así que intentamos prepararnos. Teníamos que pensar cuál era nuestro enfoque -y no sólo yo, sino también el director deportivo y el director de rendimiento- y cómo íbamos a gestionar a los medios de comunicación. Pero teníamos que ser conscientes de que tanto Fernando como Lance se conocían desde siempre, ya desde los tiempos de Ferrari. Así que cuando empezó, adoptamos el enfoque de que tenemos que ser abiertos, sinceros y transparentes con ambos en todo momento".
Y eso es lo que están decididos a hacer tras los paupérrimos resultados de Stroll y sus lloros en Suzuka. Tras su sexto puesto en Japón, Alonso -en una segunda juventud a los 42 años- es octavo en el Mundial, con 24 puntos: 53 menos que el neerlandés Max Verstappen (Red Bull) que sigue intratable. Lance Stroll, por su parte, ocupa la décima posición en la tabla, aunque con solo 9 puntos.
Una odiosa comparación que provocó que el canadiense estallase en el Gp de Japón. En Suzuka, las evoluciones aerodinámicas introducidas en suelo, pontones y motor solo parecieron funcionar en el monplaza de Alonso, porque Lance cayó eliminado en Q1 y no puntuó el domingo que acabo en duodécima posición.
Mientras Alonso califica la carrera como una de las mejores de su historia como piloto, Lance Stroll estallaba con los mecánicos cuando no pudo adelantar a Hulkenberg en el Haas y Tsunoda en el RB, que son peores máquinas. "Es increíble lo mala que es la velocidad en línea recta, tío. ¡Parece que es una categoría diferente!", dijo desquiciado.
Unos lamentos que no han caído en saco roto, ya que Stroll ha logrado que escudería inicie una investigación sobre la diferencia entre ambos monoplazas."Estamos analizando los coches, ya sabes, cómo se comportan y si se comportan igual. Creemos que hemos encontrado tal vez una o dos cosas que podrían explicar la diferencia en la clasificación. Y creo que para la carrera fue mucho mejor", señala Mike Krack, jefe de Aston Martin, en declaraciones recogidas por Motorsport.
"Siempre tratas de hacer el coche más y más benigno, y ese es el objetivo. Cuando añades rendimiento, también lo haces más benigno. O es uno de los objetivos de rendimiento. Y el análisis de los datos tiene que mostrar si funciona, pero tienes que separar la degradación de los neumáticos de los efectos externos, el tráfico y todo eso. Así que hay que analizarlo correctamente", sentencia Krack.
El equipo verde trata de reconducir así la convivencia entre ambos pilotos que hasta ahora no ha resultado fácil.