Hubo ataques ucranianos más allá de las regiones fronterizas de Rusia, impactando en instalaciones petroleras en el interior del país.
Moscú. Rusia reportó este sábado nuevas incursiones provenientes de Ucrania y la muerte de dos personas en un ataque contra una región fronteriza, en coincidencia con el segundo día de una elección presidencial diseñada para mantener en el poder a Vladimir Putin.
Los comicios, que concluirán el domingo y en los que Putin se encamina hacia una reelección triunfal, se vieron empañados por un repunte de los mortíferos bombardeos ucranianos y una serie de incursiones en Rusia realizadas por grupos proucranianos.
El Ministerio ruso de Defensa informó que “se repelieron ataques y se frustraron intentos de infiltración en el territorio de la Federación Rusa por parte de grupos de sabotaje y reconocimiento ucranianos”.
La misma fuente indicó previamente que abatió misiles, cohetes y drones en las regiones fronterizas de Bélgorod y Kursk, blancos durante la semana de ataques provenientes de la vecina Ucrania. Putin, quien emitió su voto por Internet, había prometido el viernes una dura respuesta a los asaltos y acusó a Kiev de intentar “perturbar” su carrera por otro mandato de seis años.
Rusia contraataca a Ucrania: 16 personas murieron y 60 resultaron heridas
El sábado, el gobernador de la región de Bélgorod informó que los sistemas de defensa aérea abatieron ocho misiles ucranianos, pero que dos residentes murieron y dos personas resultaron heridas.
“Un hombre conducía un camión cuando fue alcanzado por un proyectil”, escribió Viacheslav Gladkov en redes sociales.
“Otra mujer murió en un aparcamiento al que ella y su hijo fueron a dar de comer a perros. Los médicos están luchando por la vida de su hijo”, añadió. Imágenes no verificadas del ataque que circulan por las redes sociales muestran una gran explosión que destruyó un coche.
El gobernador informó posteriormente que las escuelas y centros comerciales de la ciudad de Bélgorod y otros distritos de la región permanecerán cerrados en los próximos días “dada la situación actual”.
Las autoridades de ocupación de la región de Jersón, al sur de Ucrania, afirmaron que un ataque ucraniano con drones dejó una persona muerta y cuatro heridas. Putin expresó el viernes que los ataques de las fuerzas ucranianas “no quedarán impunes”.
El presidente, de 71 años, está en el poder en Rusia desde finales de 1999 y busca extender su control sobre el país hasta 2030. Si cumple otro mandato en el Kremlin, sería el dirigente ruso que más tiempo permaneció en el poder desde Catalina la Grande, quien gobernó durante 34 años a fines del siglo XVIII.
Inessa Rozhkova, de 87 años, emitió su voto desde su hogar en la ciudad de Serguéi Posad, cerca de Moscú, con la esperanza de que las elecciones pongan fin al conflicto con Ucrania.
“¿Pueden imaginar cuántas personas han muerto? Y ahora nuestros pueblos fronterizos están sufriendo”, expresó.
En un centro de votación cercano, Elena Kirsanova, de 68 años, acudió con su esposo para votar por Putin. “Intentan asustarnos, pero esta no es una nación que se deje intimidar”, declaró a esta agencia.
Rusia celebra unas elecciones presidenciales que garantizan el poder a Vladimir Putin
Putin se presenta sin oposición, después de la exclusión de dos candidatos opuestos al conflicto en Ucrania y aproximadamente un mes después de la muerte de su principal oponente, Alexéi Navalni, en una cárcel del Ártico en circunstancias inexplicadas.
El Kremlin presenta las elecciones como una oportunidad para que los rusos demuestren su apoyo a la campaña militar en Ucrania, donde también se celebra la votación en los territorios ocupados.
Sin embargo, el primer día de votaciones se vio empañado por actos vandálicos en los centros de votación, con una oleada de detenciones de rusos acusados de verter tinte en las urnas o provocar incendios. Medios estatales mostraron soldados y funcionarios electorales recogiendo votos de residentes ancianos en Avdiivka, ciudad destruida por meses de combates antes de ser capturada por las fuerzas rusas el mes pasado.
Este sábado, dos rusas fueron detenidas, una en la ciudad de Ekaterimburgo (centro) y otra en Kaliningrado (oeste), acusadas de verter tinta verde sobre las papeletas, similar al zelyonka, un antiséptico quirúrgico utilizado para atacar a opositores rusos, incluido Navalni.
Por su parte, el partido gobernante Rusia Unida, que respalda completamente a Putin, informó que estaba siendo objeto de un ataque informático a gran escala contra su página web. El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) también anunció una serie de detenciones de rusos que, según afirman, estaban ayudando a las fuerzas ucranianas o planeaban llevar a cabo actos de sabotaje en instalaciones militares y de transporte.
En las últimas semanas, los ataques ucranianos en Rusia se extendieron más allá de las regiones fronterizas, alcanzando instalaciones petroleras ubicadas en el interior del territorio. El gobernador de la región de Samara, a unos 1.000 kilómetros de la frontera con Ucrania, informó el sábado que drones atacaron dos refinerías de petróleo, provocando un incendio en una de ellas.
Una fuente de Defensa en Kiev declaró a esta agencia que el ataque fue planeado por los servicios de seguridad ucranianos (SBU) como parte de una estrategia para perturbar el potencial económico de Rusia. “Cada derrota de este tipo reduce el flujo de petrodólares que alimenta la economía de guerra de Rusia”, afirmó.