Nicole Coco Roper, la influyente e hija mayor de la exmodelo Lynda Díaz, compartió entre lágrimas las dos opciones que tiene sobre su salud, las cuales definirán su futuro.
Coco es una creadora de contenido que fue diagnosticada con cáncer de colon en el 2020, y aunque afirmó que ya no lo padece en la actualidad, enfrenta enfermedades crónicas como resultado del tratamiento, lo que la lleva a pasar largos periodos en el hospital.
“Llevo meses tratando de decidir qué camino debo tomar entre dos opciones: seguir luchando con las infecciones o someterme a un trasplante de intestinos y luego otro de mi riñón”, explicó Coco en la reciente publicación.
Roper señaló que los procedimientos quirúrgicos son experimentales y de alto riesgo, pero que aun así asumió esa segunda opción.
“Siento que, por un lado, quiero seguir intentando y no estoy lista para despedirme, darme por vencida ni soltar a mi hija, pero tampoco sé si la forma en la que quiero morir es en una mesa operatoria porque un trasplante falló”, afirmó la influyente.
Nicole también admitió que toma las decisiones de la mano de sus doctores y de Dios, ya que en algunas ocasiones recibe comentarios que no le ayudan mucho.
Asimismo, relató que la decisión que tomó fue porque quiere pasar más tiempo con su hija, verla crecer y estar a su lado cuando lo necesite.
Coco destacó que todo ha sido muy rápido y que este miércoles 6 de febrero viajará a Houston, Estados Unidos, para reunirse con sus doctores y realizar más exámenes que valorarán las cirugías. Sin embargo, agregó que para “triunfar”, las dos cirugías deben funcionar.
La influyente contó su condición y su decisión entre lágrimas, resaltando que es algo que le da miedo y que piensa en muchas cosas, pero que está cansada de luchar contra sus enfermedades.
“He estado orando mucho porque siento que el único que me puede dar la mejor respuesta a lo que tengo que hacer es Dios y siento que esto es así”, agregó Coco.
Nicole se encuentra a su vez trabajando en su libro de memorias, el cual asegura que quiere presentarlo en un viaje a Costa Rica antes de comenzar las cirugías, las cuales admite serán muy difíciles.
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